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"En Arabia nos ofrecieron el masala chai y acá, en Paraguay, la bienvenida fue con tereré en mano", cuentan Juan Pablo Villarino y Laura Lazzarino, una pareja de viajeros que convierten las aventuras vividas en relatos de la cultura de cada país para que luego formen parte importante en su largo trajín. Lo más interesante es que el recorrido lo hacen a dedo."Paraguay no estaba en los planes, pero nos encontramos con un chico en un crucero: se llama Adolfo Rodríguez; él fue el principal representante de este país y el que más influyó para que decidiéramos conocer su cultura", expresa Juan Pablo Villarino, un viajero argentino que ha recorrido más de 40 países, en busca de conocimientos, costumbres y culturas. Desde hace tres años, viaja en compañía de Laura Lazzarino, quien también ha demostrado interés en conocer no solo a árabes, iraquíes o paraguayos, sino a las personas que tienen dentro y cómo sienten su cultura.
Cómo lo cuentan
A Juan Pablo y Laura, lo que más les gusta relatar en sus textos son aquellas historias que han sucedido de la nada, lo imprevisto. "Cuando uno viaja a dedo, hace un gran coqueteo con la incertidumbre, es como estar en el límite, no saber dónde vas a dormir cuando caiga la noche y, a la vez, jugar con este misterio; obviamente, el peligro está siempre presente, pero las aventuras no permiten que uno pare"; así lo siente Juan Pablo, quien además cuenta que, una vez, en la Patagonia, Argentina, exactamente en Río Grande, un instructor de Infantería de Marina los invitó a pasar la noche en la base aeronaval; para los viajeros fue impresionante porque pudieron observar búnkeres de lo que fue la guerra de Malvinas; ahí dentro realizaron un recorrido interno al cual personas comunes no podían acceder: este tipo de hechos marcaron la diferencia de sus recorridos.
A cuatro días de haber estado en la base aeronaval, hicieron su recorrido en un pueblo en las cercanías de los Andes, donde se encontraron con otra sorpresa. "Cuando comentamos que veníamos recorriendo el mundo a dedo, todos nos miraron asombrados y nos invitaron a quedarnos en un salón de fiestas, lo que hizo que, de dormir en una base aeronaval, pasáramos a esperar el nuevo amanecer arriba de un castillo inflable"; así que, expresa Laura, todo lo vivido cambia día a día; ella encuentra interesante la forma de actuar de las personas con las que se van encontrando en el camino.
"Paraguay no estaba en los planes, pero se metió en nuestro mapa"
Según Juan Pablo y Laura, caminar por las calles asuncenas no estaba en sus planes; la ruta más sencilla para ellos era por Jujuy, Argentina, cruzando a Bolivia para luego pasar por Perú y seguir por Ecuador, pero se encontraron con Adolfo Rodríguez, un paraguayo que apareció en uno de sus viajes por crucero y los invitó a conocer la tierra guaraní en cercanías de su Bicentenario. "Es increíble cómo algunas personas que recorren el mundo pasan por alto Paraguay: tiene muchas historias que contar; diríamos que es un país muy subestimado, tiene una cultura muy fuerte, una lengua que sobrevivió a la Conquista. Es una síntesis genial. Nuestra idea es incluir eso en nuestro próximo libro.
Viajar es todo un desafío
Recorrer el mundo implica un gran reto. Para Juan Pablo, esta es la aventura número 46, desde el 2005, año en el que comenzó, mientras que Laura cuenta su recorrido número 15: esto lo hicieron por separado; juntos, es su cuarto viaje y piensan recorrer toda Sudamérica buscando la diversidad cultural que existe en ella.
No todos los viajes son a dedo; a veces, van en cruceros o en bus para completar el destino turístico. ¿Cómo solventar los gastos? Conocer varios países no solo requiere de voluntad, sino también de ingenio. Los viajeros Juan Pablo y Laura venden las notas de sus aventuras a revistas extranjeras; su camino es largo y tratan de hacer dinero con libros artesanales y fotos de sus recorridos que luego las convierten en postales. Por otra parte, tienen un proyecto educativo con una ONG, el Movimiento Mundial por la Salud de los Pueblos. La idea es realizar charlas en escuelas públicas en su mayoría; muestran fotos de los países que van conociendo; su intención es que los chicos vean que no todo lo que pasa por la tevé es realmente lo que pasa en un país, es decir, ellos quieren ofrecer un panorama distinto, plasmar en las charlas la hospitalidad de las personas en el mundo.
Cosas curiosas
Los viajeros cuentan que les cuesta adaptarse a ciertos climas y además tratan de conocer todas aquellas diferencias que existen entre un país y otro. Cuando deciden ir a un lugar, el primer paso en el camino es conocer la historia que encierra el país, su idioma y el dinero que manejan. Laura comenta que es difícil tratar con la moneda de otros países; de alguna manera, siempre busca interpretarla asociándola con el peso argentino.
Vagabundeando en el eje del mal, así se titula el libro escrito por los viajeros; es una alusión a Medio Oriente. El libro es una ironía que busca abundar en la historia y poner en evidencia la gran solidaridad que existe entre las personas que viven ahí; eso se obtuvo a través de un arduo trabajo que duró de 11 meses, recorriendo aldea por aldea.
Los caminos invisibles de América del Sur, este es el posible nombre que darán a su próximo libro, que según Juan Pablo y Laura, retratará Sudamérica, cada país, la hospitalidad de las "personas comunes", además de aquellas cosas que unen a países vecinos y aquello que los diferencia.
Manejan tres lenguas: el español, inglés e italiano, además saben un poco de francés, pero con esto no es suficiente, ya que comentan que existen países donde hablan otras lenguas, como en Arabia y la India; en esos casos anotan frases hechas, sustantivos y verbos (dependiendo del país) en un cuaderno, lo que permite la comunicación con las personas y así pueden trasladarse a otros lugares.
"En Asunción fuimos recibidos por el amigo Víctor Gaete, que nos malcría con guaraná y con las pastas de su madre. Luego Adolfo Rodríguez nos invitó a un tour por localidades históricas de Paraguay. No sé por qué los viajeros esquivan este país... tiene hasta un cementerio de trenes de vapor tan bonito como el de Uyuni...": esto es lo que Juan Pablo deja ver en el Facebook, que utiliza para darse a conocer por sus seguidores, además de afirmar que gracias a esta red social, ellos pueden llegar a las personas en distintos países, inclusive ahora, en Paraguay, se quedan en la casa de un seguidor que dio un "me gusta" a lo que hacen.
"Divirtiéndonos en las rutas paraguayas. Hemos viajado en VW Escarabajo, en Mercedes y en 2 ambulancias. En Villarica y Guayaybí fuimos alojados por familias locales (un chico de 8 años nos enseñó guaraní), acampamos en arroyos, todos los días una sorpresa...". Así Juan Pablo y Laura recorren tierra paraguaya buscando siempre la manera de conocer a las personas que habitan en ella. Una forma de seguir a esta pareja de viajeros es a través del Facebook o en la página www.acrobatadelcamino.blogspot.com.
Es increíble cómo algunas personas que recorren el mundo pasan por alto Paraguay: tiene muchas historias que contar.
FOTO:S ABC Color/Jorge Rolón/ Gentileza del entrevistado.
Cómo lo cuentan
A Juan Pablo y Laura, lo que más les gusta relatar en sus textos son aquellas historias que han sucedido de la nada, lo imprevisto. "Cuando uno viaja a dedo, hace un gran coqueteo con la incertidumbre, es como estar en el límite, no saber dónde vas a dormir cuando caiga la noche y, a la vez, jugar con este misterio; obviamente, el peligro está siempre presente, pero las aventuras no permiten que uno pare"; así lo siente Juan Pablo, quien además cuenta que, una vez, en la Patagonia, Argentina, exactamente en Río Grande, un instructor de Infantería de Marina los invitó a pasar la noche en la base aeronaval; para los viajeros fue impresionante porque pudieron observar búnkeres de lo que fue la guerra de Malvinas; ahí dentro realizaron un recorrido interno al cual personas comunes no podían acceder: este tipo de hechos marcaron la diferencia de sus recorridos.
A cuatro días de haber estado en la base aeronaval, hicieron su recorrido en un pueblo en las cercanías de los Andes, donde se encontraron con otra sorpresa. "Cuando comentamos que veníamos recorriendo el mundo a dedo, todos nos miraron asombrados y nos invitaron a quedarnos en un salón de fiestas, lo que hizo que, de dormir en una base aeronaval, pasáramos a esperar el nuevo amanecer arriba de un castillo inflable"; así que, expresa Laura, todo lo vivido cambia día a día; ella encuentra interesante la forma de actuar de las personas con las que se van encontrando en el camino.
"Paraguay no estaba en los planes, pero se metió en nuestro mapa"
Según Juan Pablo y Laura, caminar por las calles asuncenas no estaba en sus planes; la ruta más sencilla para ellos era por Jujuy, Argentina, cruzando a Bolivia para luego pasar por Perú y seguir por Ecuador, pero se encontraron con Adolfo Rodríguez, un paraguayo que apareció en uno de sus viajes por crucero y los invitó a conocer la tierra guaraní en cercanías de su Bicentenario. "Es increíble cómo algunas personas que recorren el mundo pasan por alto Paraguay: tiene muchas historias que contar; diríamos que es un país muy subestimado, tiene una cultura muy fuerte, una lengua que sobrevivió a la Conquista. Es una síntesis genial. Nuestra idea es incluir eso en nuestro próximo libro.
Viajar es todo un desafío
Recorrer el mundo implica un gran reto. Para Juan Pablo, esta es la aventura número 46, desde el 2005, año en el que comenzó, mientras que Laura cuenta su recorrido número 15: esto lo hicieron por separado; juntos, es su cuarto viaje y piensan recorrer toda Sudamérica buscando la diversidad cultural que existe en ella.
No todos los viajes son a dedo; a veces, van en cruceros o en bus para completar el destino turístico. ¿Cómo solventar los gastos? Conocer varios países no solo requiere de voluntad, sino también de ingenio. Los viajeros Juan Pablo y Laura venden las notas de sus aventuras a revistas extranjeras; su camino es largo y tratan de hacer dinero con libros artesanales y fotos de sus recorridos que luego las convierten en postales. Por otra parte, tienen un proyecto educativo con una ONG, el Movimiento Mundial por la Salud de los Pueblos. La idea es realizar charlas en escuelas públicas en su mayoría; muestran fotos de los países que van conociendo; su intención es que los chicos vean que no todo lo que pasa por la tevé es realmente lo que pasa en un país, es decir, ellos quieren ofrecer un panorama distinto, plasmar en las charlas la hospitalidad de las personas en el mundo.
Cosas curiosas
Los viajeros cuentan que les cuesta adaptarse a ciertos climas y además tratan de conocer todas aquellas diferencias que existen entre un país y otro. Cuando deciden ir a un lugar, el primer paso en el camino es conocer la historia que encierra el país, su idioma y el dinero que manejan. Laura comenta que es difícil tratar con la moneda de otros países; de alguna manera, siempre busca interpretarla asociándola con el peso argentino.
Vagabundeando en el eje del mal, así se titula el libro escrito por los viajeros; es una alusión a Medio Oriente. El libro es una ironía que busca abundar en la historia y poner en evidencia la gran solidaridad que existe entre las personas que viven ahí; eso se obtuvo a través de un arduo trabajo que duró de 11 meses, recorriendo aldea por aldea.
Los caminos invisibles de América del Sur, este es el posible nombre que darán a su próximo libro, que según Juan Pablo y Laura, retratará Sudamérica, cada país, la hospitalidad de las "personas comunes", además de aquellas cosas que unen a países vecinos y aquello que los diferencia.
Manejan tres lenguas: el español, inglés e italiano, además saben un poco de francés, pero con esto no es suficiente, ya que comentan que existen países donde hablan otras lenguas, como en Arabia y la India; en esos casos anotan frases hechas, sustantivos y verbos (dependiendo del país) en un cuaderno, lo que permite la comunicación con las personas y así pueden trasladarse a otros lugares.
"En Asunción fuimos recibidos por el amigo Víctor Gaete, que nos malcría con guaraná y con las pastas de su madre. Luego Adolfo Rodríguez nos invitó a un tour por localidades históricas de Paraguay. No sé por qué los viajeros esquivan este país... tiene hasta un cementerio de trenes de vapor tan bonito como el de Uyuni...": esto es lo que Juan Pablo deja ver en el Facebook, que utiliza para darse a conocer por sus seguidores, además de afirmar que gracias a esta red social, ellos pueden llegar a las personas en distintos países, inclusive ahora, en Paraguay, se quedan en la casa de un seguidor que dio un "me gusta" a lo que hacen.
"Divirtiéndonos en las rutas paraguayas. Hemos viajado en VW Escarabajo, en Mercedes y en 2 ambulancias. En Villarica y Guayaybí fuimos alojados por familias locales (un chico de 8 años nos enseñó guaraní), acampamos en arroyos, todos los días una sorpresa...". Así Juan Pablo y Laura recorren tierra paraguaya buscando siempre la manera de conocer a las personas que habitan en ella. Una forma de seguir a esta pareja de viajeros es a través del Facebook o en la página www.acrobatadelcamino.blogspot.com.
Es increíble cómo algunas personas que recorren el mundo pasan por alto Paraguay: tiene muchas historias que contar.
FOTO:S ABC Color/Jorge Rolón/ Gentileza del entrevistado.