Protestantismo. División radical del cristianismo

Se salvan por la fe, no por las obras y la Biblia no necesita de una autoridad eclesiástica para ser interpretada. En Paraguay fueron los grandes precursores de la ley de divorcio al término de la dictadura stronista. Los protestantes cambian la historia de la humanidad cuando se separan de Roma, hace casi quinientos años.

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Según la tradición cristiana, en octubre de 1517, el fraile alemán Martín Lutero clavaba en la puerta de la Iglesia de Wittenberg sus famosas 95 tesis, que condenaban la avaricia, la actitud desmedida, el paganismo y otros errores de la Iglesia católica, comenzando lo que conocemos como reforma protestante y dando inicio a la división radical del cristianismo. El teólogo criticaba la venta de indulgencias por parte del papado, ya que gran parte de las riquezas que tenía Roma en ese entonces se debía al perdón de los pecados previo pago al clero, además de advertir sobre los abusos que cometían las altas autoridades eclesiásticas. Condenado por Roma por apostasía y herejía, Lutero fue excomulgado y, de esa forma, se iniciaron las separaciones y se crearon nuevas iglesias cristianas, sin reconocimiento del papa.

La base principal en que se sustenta la doctrina protestante es en la Biblia, a la que se reconoce como única autoridad, dejando de lado la jerarquía verticalista del catolicismo. La salvación de las almas se da por gracia divina, por fe, pero no por obras, como en la tradición católica. El protestantismo también rechazará la idea de transustanción, es decir, la conversión del cuerpo de Cristo en carne, y se sustenta, además, en la oposición radical a la adoración o idolatría de imágenes de santos o ídolos terrenales. Dentro de esta corriente reformista, el papel de la confesión a un ministro tampoco es tenida en cuenta, ya que los pecados deben ser perdonados por el propio Dios si hay arrepentimiento por parte del feligrés.

A diferencia de la tradición católica, el bautismo es un acto consciente de un adulto y, por sobre todas las cosas, voluntario. Se tiene la idea de que para ser un verdadero cristiano uno debe decidir recién en la edad adulta aceptar a Cristo como el salvador.

Purgatorio

El protestantismo rechaza la idea de la Inmaculada Concepción de María y el purgatorio, por lo que orar por los difuntos es una pérdida de tiempo. En este último punto, cabe destacar que la Iglesia católica reconsideró hace poco tiempo la idea de este periodo de transición de purificación de las almas antes de llegar al cielo o paraíso, por lo que se considera un cambio radical dentro de la historia teológica del Vaticano.

Los protestantes siguen esperando también la segunda venida de Cristo y el día del juicio final, como los católicos.

No hay único líder

En el catolicismo, el papa es el sucesor de San Pedro y, por lo tanto, el primer y principal representante del reino celestial en la Tierra. Además, es cabeza política dentro de la estructuración religiosa. Sin embargo, el protestantismo no cuenta con esta figura. Aunque existen diversas organizaciones internacionales que aglutinan a diversas congregaciones, los protestantes no tienen un líder principal. Además, existen decenas de corrientes, pero las principales y las que más adeptos tienen son: anglicanistas, bautistas, metodistas, pentecostales, presbiterianos y reformados.

Actualmente, en total tendrían 800 millones de fieles repartidos en todo el mundo.

La historia del protestantismo está protagonizada primeramente por persecución, excomunión y violencia por parte de los católicos. Aunque después, donde el protestantismo tenía poder político se imponía también con dureza y atentaba contra las otras creencias religiosas, incluyendo el catolicismo.

Aún así, el protestantismo siguió ganando adeptos y dentro del cristianismo tiene mucha más apertura a temas científicos o sociales controvertidos. Algunas congregaciones como la de los anglicanos ordenan sacerdotisas e incluyen a homosexuales dentro del episcopado, lo que genera también críticas internas. Sin embargo, varias congregaciones no reconocen teorías científicas como la de la evolución o la de formación del universo a través del Big Bang, y toman literalmente las creencias del Génesis y se oponen a investigaciones científicas, lo que le vale el título de conservadoras.

Paraguay

No existe un dato de cuántos paraguayos practican el protestantismo, pero según el Dr. Alfred Neufeld, pastor menonita y rector de la Universidad Evangélica del Paraguay, la comunidad evangélica en Paraguay llegaría a las 500.000 personas, mientras que los bautizados serían unos 200.000. Durante las décadas del 40 y 50 del siglo pasado, los evangélicos fueron perseguidos por el gobierno y por fanáticos católicos. Algunos templos fueron quemados y varios pastores sufrieron represión y cárcel, simplemente por profesar una corriente religiosa distinta. Fueron también artífices de la ley del divorcio en 1991, a pesar de la férrea oposición de la Iglesia católica, que anunciaba una “catástrofe social” y de un Estado laico, consagrado en la Constitución Nacional de 1992.

Neufeld indica que hay 23 congregaciones evangélicas mayores en el país y otras menores, pero que las más representativas son las pentecostales, seguidas de las menonitas, bautistas, metodistas y presbiterianas. Comenta que existen dos grupos principales que aglutinan nuevamente a los evangélicos: por un lado, la Iglesia de Dios y, por el otro, la Asamblea de Dios. Según el pastor, que tiene un doctorado en Teología, la jerarquía protestante es democrática porque se elige anualmente en asamblea.

“El protestantismo dio muchos aportes a la humanidad, comenzando por su ética de la producción y el trabajo constante. El ahorro también es fundamental para los protestantes. Actualmente, hay diálogo abierto con otras corrientes —especialmente con los católicos— para evaluar diferencias y encontrar más similitudes. También hay una búsqueda de misticismo de encontrar respuestas profundas a la existencia y la gente podría encontrar esto en el protestantismo”, manifiesta.

Por su parte, el pastor Juan Valiente, presidente de la Junta Teológica y Educativa de la Convención Evangélica Bautista del Paraguay, sostiene que el evangelismo en nuestro país tiene muchos adeptos, pero algunos deciden separarse para formar su propia congregación o sectas. “Los que fundan las sectas salen de nuestros grupos y crean su propia doctrina. No hay que juzgarlos por su actuar, pero la Biblia es una sola y nosotros nos guiamos por ella”, señala.

Comenta que en Paraguay de a poco hay más respeto hacia los diversos credos y que eso llevará a la unidad algún día. Puntualiza que las diferencias son mínimas, pero que los cristianos deben acercarse a su Dios a través de Jesús y las Sagradas Escrituras.

Protestantismo

- Surge en el siglo XVI.

- Tiene diversas congregaciones.

- Niega la autoridad episcopal y la infalibilidad papal.

- Reconoce como única autoridad a la Biblia.

- Rechaza la veneración de santos o ídolos.

- La salvación de las almas se da por fe y no por obras.

- Espera la segunda venida de Jesús y el juicio final.

- Actualmente tiene casi 800 millones de fieles en el mundo.

Solas

Las solas (solamente, en latín) son las creencias básicas de los reformadores y se resumen en:

- Solo por medio de las Sagradas Escrituras: es la única fuente de doctrina cristiana, sagrada e inspirada. No necesita de una autoridad eclesiástica para ser interpretada.

- Solo por la fe: ser declarado justo se consigue por la fe en Dios y no por las obras, como en los católicos.

- Solo por la gracia: el “favor inmerecido” de la salvación de las almas únicamente se consigue por la gracia o favor de Dios, no por mérito propio.

- Solo a través de Cristo: no hay salvación posible si no es a través de Jesús, el único mediador.

- La gloria solo para Dios: toda la gloria es para la deidad y nada más que para ella.

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