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La solista de canto sanlorenzana Kaddy Nahir Ortiz Yegros (19) expande su horizonte hacia el exterior. En el 2013 viajó a Japón junto con el arpista Antonio Torales y luego a los Estados Unidos. Ahora nuevamente prepara maletas para pisar la “tierra del sol naciente”, donde pretende brillar y posicionar nuestra cultura. Y claro, es el objetivo principal de la artista: difundir y defender la música paraguaya, y demostrarles a todos los jóvenes el valor que tiene. No obstante, refiere que influyó mucho en su desenvolvimiento la versatilidad de interpretación de canciones de varios estilos.
Kaddy –conocida cuando niña como la “princesita del folclore”– ya empezó a triunfar a los 11 años cuando en el 2005 fue la ganadora del programa televisivo Show Match, conducido por Marcelo Tinelli. Su canto fue Pájaro chovy, en español, pero a pedido de la producción también deleitó con la canción Bésame mucho, en japonés, y Ñemity, en guaraní. El italiano es otro idioma que domina en el escenario.
Así, su gran talento, siguiendo la pista de otros grandes artistas como Luis Alberto del Paraná, le abrió puertas a nivel internacional. Tuvo varios viajes al exterior para participar de eventos y festivales puntales también en otros países de Sudamérica.
Sin embargo, la decisión más difícil de su vida fue haber colgado su guardapolvo blanco de estudiante de Medicina para poder viajar a Japón, donde –afirma– la gente es muy cálida y reconoce el talento. Igualmente, la separación de su madre, Miriam Yegros, no fue nada fácil. Desde los seis años fue su compañera inseparable en todas sus presentaciones y apoyo incansable.
Volviendo a la experiencia vivida en la “tierra del sol naciente”, cuenta que trabajó, desde abril a octubre del 2013, en el Hotel Kagaya de la ciudad de Nanao, Shi Ishikawa, junto con el arpista Antonio Torales. Apenas finalizaron sus contratos de trabajo, les fueron renovados por los productores de la empresa y viajan nuevamente a dicha nación a fines de marzo, por otros seis meses.
El público japonés es de lo más exquisito, refiere Kaddy Nahir, quien dijo sentirse muy privilegiada por haber podido llegar muy alto, ya que es muy difícil ingresar al mercado artístico japonés. “Esto hace que me esfuerce cada día más, elevando mis conocimientos teóricos y prácticos e intensificando en la interpretación y ejecución de instrumentos como la guitarra y el piano en un conservatorio de la misma ciudad de Nanao”, apunta la artista.
En referencia al idioma, acota que realmente le resulta muy difícil, pero está estudiando y practicando el japonés. Se comunica con el inglés. Desarrolla el repertorio de músicas internacionales en varios idiomas (inglés, japonés, portugués, español, italiano) incluyendo polcas y guaranias en guaraní, que por cierto –dijo– les gustan mucho a los japoneses.
Actualmente, está componiendo temas propios. Esto le da la calificación de cantautor de temas de varios estilos, que próximamente los difundirá a su regreso de Japón.
Por otro lado, recientemente realizó su presentación en un evento organizado por el Centro Paraguayo de Nueva York (CPNY), en conmemoración al Día la Mujer Paraguaya. La madre de Kaddy, Miriam, dijo que la comisión directiva y la presidenta del CPNY, la señora Lourdes Frutos, consideraron que era digno brindarle un homenaje a la artista, como genuina embajadora de nuestra música y teniendo en cuenta que a tan corta edad es una de las referentes más importantes de nuestra cultura por el mundo.
“Mi emoción fue indescriptible ante la sorpresa de escuchar a los niños y niñas de la Escuela Paraguaya de Nueva York que cantaban con mucha fuerza el Himno Nacional en guaraní, el tema Viva el Bravo Paraguay, Paraguaya linda a cargo del profesor Juan Granada. Admiro a sus padres, que les incentivan a conocer la historia de nuestra patria y música”, manifiesta.
Uno de los propulsores de la creación de la Escuela Paraguaya de Nueva York fue el arquitecto Jorge Bosh con su señora, Mónica de Bosh, quienes hicieron lo posible para lograr el reconocimiento del Ministerio de Educación y Cultura del Paraguay y constituir así la primera escuela paraguaya en el extranjero, con profesores con rubros pagados por el Gobierno paraguayo.
Asimismo, es loable destacar la creación de la Asociación de Músicos del Paraguay en Estados Unidos, que cuenta con el reconocimiento del Estado de Nueva York, cuyo objetivo principal es promover la música paraguaya y dignificar la profesión de los músicos residentes en dicha importante nación. Está presidida por el señor José Irala y la integran: Mario Iglesias, Silvio Solís, Dionisio González, Arnaldo Brítez y como invitada figura Kaddy Nahir.
antonia@abc.com.py