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Fuente de inspiración de José Asunción Flores y Manuel Ortiz Guerrero; todo asunceno ha oído alguna vez hablar del arroyo Mburicaó. Pero de aquellas cristalinas y refrescantes aguas que albergaban a musas, hoy, prácticamente, solo queda un vertedero que aloja basura y contaminación.
No obstante, este calamitoso estado del arroyo le sirvió como un desafío al diseñador Jorge David Báez (24) para realizar tres de sus más bellas creaciones. “Todo surgió de una idea de la agencia Kausa, que, justamente, es conocida por hacer campañas bastante fuertes y controversiales”, comenta. La gente de la agencia le propuso trabajar con un concepto que tuviera que ver con la situación del arroyo Mburicaó, y cómo lo podían aplicar a la moda y que sea contundente.
El objetivo del proyecto era ver de qué manera se podía visibilizar el estado de las aguas del arroyo y que cause impacto. Fiel a su creatividad, el diseñador decidió hacer algo estético y de alta costura; que diera un mensaje bastante fuerte: teñir las telas con las aguas del arroyo, que, justamente, están contaminadas con sangre vacuna y todos los desechos de los frigoríficos, lo cual le da un color de tono rojizo.
Para que las telas pudieran mantener el color, le pusieron un fijador químico. En total, Andrés diseñó tres vestidos: dos de color rojo y uno totalmente blanco, con unos volados que representan la pureza y fluidez del agua. Esta prenda estaba sumergida hasta una parte en una pecera de cristal con las aguas contaminadas. “El día que desvelamos cómo están hechos los vestidos, realicé como una performance y teñí el vestido en vivo ante los espectadores para demostrar cómo el ser humano distorsionaba esa pureza”, explica.
Dos días después de que se lanzó la campaña, la Municipalidad de Asunción realizó la limpieza de las aguas del arroyo. “Porque aparte de la contaminación, hay muchísima basura acumulada por todo lo que arrojan allí. Es decir, pronto tuvo un pequeño impacto positivo”, resalta. Pero esto es solo el principio. Según Andrés, piensan seguir activando en pro de la recuperación del arroyo. Van a mostrar más materiales audiovisuales que estarán expuestos en el Shopping del Sol, las redes sociales y cuentas de YouTube.
Van a hacer un seguimiento para que, justamente, se pueda accionar ante esta problemática, y utilizaron la moda como una herramienta, porque a la gente le atrae bastante y así poder dar un mensaje bien fuerte. “En el Paraguay, la moda es considerada como algo frívolo desde el punto de vista comercial, pero yo la tomé como un testigo más artístico, comunicativo y de denuncia social, y, además, al complementarla con el arte, tenga un mensaje”, refiere y agrega que también cuentan con el apoyo de otras instituciones, como la oenegé A todo pulmón, para el asesoramiento de las acciones legales que hay que realizar para acercar la denuncia a las autoridades pertinentes.
Los dos vestidos rojos han estado expuestos en el Shopping del Sol. La gente pudo verlos y apreciarlos, pero se les dijo que no podían tocarlos porque estaban teñidos con las aguas del Mburicaó. “Es decir, no son para vestir”, resalta. Diseñador desde los 17, y uno de los finalistas del Paraguay Diseña, Andrés ya está por cumplir un año con su marca comercial. El año pasado presentó una colección en conjunto con la diseñadora compatriota Ilse Jara en Dubái, en el Arab Fashion Week.
Egresado del Instituto Superior de Arte, de la UNA, Andrés Báez estudió Diseño de Moda con un enfoque artístico y conceptual. Aunque no proviene de una familia dedicada a la moda, cuenta que todos son muy creativos. Definitivamente, la herencia creativa se lleva en las venas.
De muestra
La colección Mburicaó fue elegida por los directivos del Museo del Barro para la muestra de Arte contemporáneo, que será presentada en el museo. “Es un honor que la indumentaria en el Paraguay esté pasando a una plataforma de muestra dentro de un museo y sea vista desde otra perspectiva, como el campo expresivo, estético o de carácter social”, expresa el diseñador.
Fotos: ABC Color/Celso Ríos.