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Realmente los libros electrónicos existieron desde que los libros se editaron con ordenadores, pero no se publicaban en este formato. Esto se generaliza al final de la década de los 70 y principio de los 80.
Los libros eran escritos y entregados en formato digital, según el procesador de textos utilizado: Wordperfect, MS Word, Ami Pro, otros.
Más tarde, la mejora en las pantallas del ordenador popularizó la aparición de documentos en formato digital que, además, se distribuían por red: correo electrónico o la misma web. La gente empezó a leer en pantalla y a no imprimir los documentos que le llegaban. Todo esto ocurría a finales de los 90.
Con la llegada del nuevo siglo, y ante las molestias de leer durante muchos minutos de forma continua o incluso horas en pantalla, se desarrollaron tecnologías que trataban de conseguir que la lectura de libros electrónicos fuese tan cómoda como los libros de papel. Y bueno, la nueva revolución del mundo digital ya está instalada. Primero fueron los sectores de la música y del video –con el cine y la televisión–, ahora le toca el turno al sector editorial con los ebooks o libros digitales.
María José Peralta Heisecke, directora de Ediciones Generales de Prisa, Editorial Santillana, señala que las digitalizaciones se van dando de acuerdo a los libros que se “editan en casa”. “Tenemos el mandato de que todos los libros que salgan en papel también se haga lo mismo en ebook. Hay una gran demanda de digitalización, podría decirse que están coexistiendo las dos versiones”, afirma.
¿Qué implica eso para una editorial? En la actualidad significa que, además de hacer la inversión en papel, las grandes editoriales se encuentran con la obligación de convertir esos libros en ebooks, de tal manera que el lector pueda elegir la versión que más le agrade. “Hasta ahora no registramos un cambio sustancial en los hábitos de libros de papel a libros electrónicos, pero tampoco podemos negar que cada vez más gente se suma a los ebooks. Así como hay una expansión en la venta de los dispositivos, también se venden cada vez más libros digitales, y nuestro compromiso es satisfacer las demandas de los consumidores”, revela Peralta.
Sobre el avance de la digitalización, en todos los ámbitos, todavía cree que falta mucho para que suplante a los textos impresos. “El libro electrónico no va a suprimir al libro tradicional, o por lo menos, no por ahora”, sostiene.
No obstante, resalta los beneficios de un ebook. “Con los medios electrónicos la transferencia de gran cantidad de información se hace más fácil y ágil. Por esta razón, un libro electrónico puede contener más información y la posibilidad de acceder a datos externos. También cuenta con facilidad de distribución, a través de la red, haciendo el proceso más rápido y a un menor precio. El libro electrónico permite video, imagen, animación, sonido, entre otras opciones”.
¿Qué hay de la piratería? “Cuando el autor y la editorial no ganan es cuando estamos hablando de piratería, pero en nuestro caso cuidamos esos detalles y los autores, tanto como la editorial están ganando”, afirma.
Sobre el control, Peralta Heisecke resalta que es imposible. “El gran desafío de las editoriales es bajar los costos, de manera que ya no sea atractivo piratear; se está viendo incentivos para que esto no ocurra”, dice.
En otro momento, expresa que, en Santillana, todos los libros de literatura están digitalizados, aunque en los sectores escolares todavía no. “Este año, tenemos el objetivo de convertir nuestros libros infantiles y juveniles paraguayos a ebook también. Estamos trabajando en ello, de tal manera que el chico que cuente con iPad ya pueda bajarse los libros que sean de su interés personal o académico.
Digo iPad porque hasta ahora desde el único lugar donde se puede comprar, desde Paraguay, por una cuestión de contrato y que, a nivel país, es de Apple Store; de Amazon no es posible porque aparece el IP de Paraguay, salvo que se esté en otro país. Pero a medida que se liberen los contratos, esto va a ir cambiando”, aclara.
En este momento, la editorial comercializa 3388 títulos en formato ebook a través de Amazon, Apple Store, Barnes & Noble, Google Play, FNAC, Casa del Libro y cientos de otras librerías online del mundo.
Sin duda, el cambio hacia un mundo digital se está produciendo a un ritmo muy veloz en todos los entornos culturales y sociales. Y la escuela del siglo XXI está pidiendo que se implante una digitalización de verdad en las aulas.
Libros paraguayos en ebook
Peralta Heisecke comenta cuales son los libros paraguayos que tienen disponible en ebook y son: La pasión de Lucrecia, de Carlos Mateo Balmelli; Atajo, de Esteban Cabañas; Chico Bizarro y las moscas, de Mónica Bustos; Historia del Paraguay, de Ignacio Telesca y otros; La Guerra de la Triple Alianza vol. I, II y III, de Thomas Whigham; Calumnia, de Michael Lillis y Ronan Faning; Itaipú, de Carlos Mateo Balmelli. “A nivel internacional, se está convirtiendo todo el catálogo a ebook también. Además, desde el año pasado, estamos tratando de que cada libro que se publica bajo un sello nuestro (Alfaguara, Suma de Letras, Taurus, Punto de Lectura, Aguilar, etc.) aparezca tanto en papel como en ebook”.
En fin. Por un lado, el libro en papel sigue siendo difícil de mejorar, bastante más amigable y cálido, y muchas veces incluso más bello que cualquier pantalla táctil. Por el otro, las exigencias del mundo actual piden adecuarse a los cambios; el progreso material y tecnológico van en una misma dirección y los ebooks ofrecen muchas ventajas. ¿Digital o papel? Podríamos decir también que los usuarios tienen distintas opciones. El debate queda abierto. Lo claro y cierto es que hay que transitar hacia una escuela, una universidad o una sociedad en la que se lea. Sea en papel o en formato digital, la lectura hay que incentivarla siempre.
Algunas ventajas
En Paraguay, al ser un país chico, los lectores son pocos. Entonces, la gran ventaja es la inmediatez. “Si se presenta un libro en Francia o en otro punto, al instante se puede tener en el iPad; esa es la gran ventaja”, revela Peralta Heisecke.
Otra ventaja es que no ocupan mucho lugar: los amantes de los libros siempre tienen un problema de espacio. Los libros inundan a su alrededor, con la consecuente acumulación de polvo. Son más baratos y rápidos de producir. Desafían el tiempo, pueden ser entregados casi al instante: tenés toda una librería al alcance de un clic. No tienen ediciones agotadas, con las ediciones electrónicas el libro siempre estará disponible globalmente. Se acomodan al lector, podés ajustar el tamaño y tipo de letra y también escoger el color del papel. Permiten a los editores a publicar más y a los lectores a leer más.
También podemos referirnos a las desventajas y decir, por ejemplo, que no son objetos físicos independientes, necesitan de un lector electrónico, una computadora, un teléfono inteligente o algún otro artefacto para su lectura, y también de una conexión a internet para comprar. No pueden ser firmados por el autor, se pierde parte del ritual tradicional de la presentación personal de un libro. No pueden constituir un regalo, aunque existen las tarjetas de regalo en las tiendas online, el proceso no es fácil para un inexperto, ni tiene el encanto del regalo de un libro impreso. No tienen olor y se pierde el tacto del papel, hay personas que disfrutan el olor de los libros y el contacto táctil con el papel al pasar las hojas. Pueden tener más facilidad de piratería: muchos autores y editores tienen temor de la pérdida de control comercial de la obra por las copias no autorizadas, pero en otros casos resulta más fácil piratear que un libro impreso.
OTROS DATOS
Actualmente, la denominación de los libros está cambiando de la siguiente forma:
Libro de papel, o sea, el libro de toda la vida, se denomina pbook
(pbook = paper book o libro de papel).
Libro digital, se conoce como ebook
(ebook = electronic book o libro electrónico). El término ebook también se usa para denominar al lector de libros digitales, aunque este debería ser un ereader o lector de libros digital.
Fechas destacables para el libro electrónico:
1971. Surge el proyecto Gutemberg de digitalización de libros.
1995. Amazon comienza la venta de libros digitales.
2000. Stephen King publica su última novela solamente en formato digital.
2006-2007. Sony (Sony Reader), Amazon (Kindle) y Papyre (en España) lanzan al mercado sus ereaders con tinta electrónica.
2006-2010. Los teléfonos móviles vienen con pantallas de gran formato y la posibilidad de leer ebooks.
ndure@abc.com.py • Fotos ABC Color/Gustavo Báez/Fernando Romero.
Agradecimiento especial a librería El Lector y a Nueva Americana. Las niñas son Emma Riveros, Fiona Mattalia y Ana Victoria Aranda.