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Natural de Arroyos y Esteros, Tony Martínez comenzó en la música en 1963. Canta, es compositor y toca varios instrumentos musicales, como el bongó cubano, maracas venezolanas, la guitarra, el cuatro venezolano, la percusión y el bajo.
Toda una vida, guitarra adentro probablemente sea el título de su autobiografía. La idea es compartir las diversas experiencias que vivió gracias a la música. Menciona el caso, por ejemplo, de cuando conoció a Carlos "el Chacal" (Ilich Ramírez Sánchez), quien purga condena en Francia por actos de terrorismo. “Lo conocí, pero no sabía quién era”, relata el músico paraguayo.
Tony decidió escribir su biografía y comenzó a hacerlo hace dos años. “Me gusta escribir”, confiesa el artista, que se toma su tiempo removiendo los recuerdos de su vida. El libro tendrá unas 250 páginas de desafíos, triunfos, penas y glorias.
Su primer escrito publicado se basó en una expedición que duró una semana desde Arroyos y Esteros hasta Luque llevando productos para el consumo. Relato de una semana que mide 27 leguas es el título de esta obra editada en 1985, en Alemania. Tony se basó en hechos reales para escribir el material, reeditado y ampliado en 1997.
En ese momento le picó el gusto por la escritura. “No va a ser aburrido para la gente”, anticipa Tony. “El libro arranca con una anécdota sobre el viaje a Europa. Tenía 23 años y debía viajar a Madrid. Salimos un miércoles santo de 1968 y no teníamos nada allá”, rememora Tony, con una sonrisa en los labios al verse como un joven audaz y sin temores en aquellos tiempos, dispuesto a realizar sus sueños.
Cada capítulo del libro versará sobre un tema específico: su carrera, el tiempo que vivió en Alemania, su participación en el grupo Luis Alberto del Paraná y Los Paraguayos, su labor en Los Mágicos Paraguayos, su trayectoria en la radio y su trabajo en la promoción de la música salsa, ganándose así el título de Dr. Salsa, entre otras facetas de su vida en 50 años de trayectoria.
Su contacto con el arte se dio a través de su padre, quien llevaba la alegría musical a la casa para amenizar los descansos durante la zafra de caña de azúcar.
A los 21 años, Tony optó por la música, siguiendo los pasos de sus primos Marissa “La reina morena de la canción” y Dionisio Villamayor.
Al tener la oportunidad de recorrer el mundo y de conocer a tanta gente, Tony llegó a una conclusión: “El músico paraguayo es versátil y superprofesional”, y agradece haber tenido tantas buenas experiencias. “Recorrer es fantástico. Es un mérito personal”, argumenta.
Con el tiempo, Tony se fue afianzando en la esfera artística.
En 1981, en una de sus visitas vacacionales al país, Tony comenzó con la difusión del jazz latino y la salsa. Años después, siguió con la promoción y logró espacios en la radio que hasta hoy en día tiene. Ya instalado nuevamente en el país, Tony sigue con programas radiales, editando discos y haciendo espectáculos en vivo. “Retorné por dos razones muy importantes”, confiesa. “Había formado una familia y tuve un problema en la garganta. Como mínimo tardaría un par de años en recuperarme y el doctor me aconsejó el clima de mi país, que me iba a ayudar en mi recuperación”, explica.
Mientras termina su autobiografía, cuyo lanzamiento está fijado para este año, Tony celebra que su canción Rumba tiruli figurara entre las 50 canciones más sonadas en el popular sitio web: www.mallorcamegacharts.de en el 2012.
maponte@abc.com.py