La pelota Jabulani fue la estrella del Mundial de Sudáfrica 2010, pero hoy ya no es solo una protagonista lejana, sino es la que rueda en nuestras canchas hace dos fines de semana y a la que temen, en primer lugar, los arqueros y en segundo, los padres, que deben complacer pedidos de sus hijos, pues el implemento en su versión original (no las imitaciones legales y de las otras) cuesta 110 dólares, un poco más de 500.000 guaraníes.
En realidad, esta célebre protagonista del fútbol ya festejó su primer añito, pues su presentación oficial fue en la Copa de Confederaciones de la FIFA, que se jugó en junio del 2009 en Sudáfrica, una competencia ya habitual entre selecciones campeonas continentales, que se juega un año antes de cada Copa del Mundo.
Pero sin duda que el salto al gran escenario fue semanas atrás en Sudáfrica 2010, donde la Jabulani en 63 partidos y la Jobulani, en la final ("Jo" en alusión a la ciudad de Johannesburgo, donde se celebró el encuentro entre España y Holanda), concentró la atención, sobre todo porque desde apenas iniciada la competencia, se le atribuyeron culpabilidades en algunas equivocaciones muy marcadas de los goleros, especialmente la del inglés Robert Green, en el juego de su selección contra Estados Unidos, en el debut, hecho que le costó el puesto en los tres siguientes encuentros de la selección británica.
Fawzi Chaouchi, golero de la selección de Argelia pasó por lo mismo, cuando recibió un gol en un tiro inocente del esloveno Robert Koren y, para no buscar ejemplos solo lejos de lo nuestro, Justo Villar probó con la peor de las consecuencias, un tanto en su arco, que calcular la trayectoria de este revolucionario esférico no era cuestión sencilla, al salir a cortar un centro, del cual quedó lejos y De Rossi marcó el empate para Italia en Ciudad del Cabo en el estreno albirrojo.
¿Se equivocaron la FIFA y su proveedora Adidas en la fabricación de este balón? No, porque respetando las medidas reglamentarias de tamaño (69 centímetros de circunferencia) y peso (440 gramos), lo que se buscó es que las características del implemento ayudase a conseguir mayor cantidad de goles, que es lo único que mantendrá viva la llama del interés en el espectáculo futbolístico.
Si son los arqueros el pato de la boda para alcanzar ese objetivo, no lo será por mucho tiempo, porque como todo (a algunos les agrada poner como ejemplo las prótesis dentarias) solo incomoda al principio y pronto llega el acostumbramiento y la familiarización.
Diego Barreto, integrante del plantel albirrojo en Sudáfrica 2010 y actual capitán de Cerro Porteño, le quitó dramatismo al tema cuando al anunciarse que desde la segunda fecha del torneo Clausura se usarían las pelotas Jabulani, al apuntársele que tendría ventaja sobre sus demás colegas, porque ya tenía casi dos meses entrenando con ella, respondió que "no hay tal ventaja, porque a todos les llevará un par de días acostumbrarse, así como me ocurrió a mí. No hay muchos secretos; es una pelota nueva y como tal tiene sus características innovadoras, nada más".
En dos fechas jugadas, hasta el momento nadie se ha atrevido a buscar disculpas con una cerrada descarga de acusaciones contra las características del balón, aunque se debe decir que los buenos rematadores, como el brasileño Inca (Sol de América), el cerrista Jorge Núñez y el liberteño Manuel Maciel ya han asociado sus recientes conquistas con la capacidad inédita de impulsión a gran velocidad que posee este.
Según un estudio realizado nada menos que por la NASA, se comprobó que, enviada a más de 72 kilómetros por hora, la pelota Jabulani describe una trayectoria impredecible, lo que alienta a quienes confían en la fuerza de sus disparos, se asocien a esta particularidad, para alcanzar la meta principal del juego, que es el gol.
Varias ligas de todo el mundo emplean este balón en sus campeonatos oficiales, como las de España, Alemania, Sudáfrica, Japón, Argentina, Paraguay, Bolivia, Ecuador, Honduras, entre otras.
En todo caso, la Jabulani es una pelota tecnológica y de avanzada, así como lo fueron en su momento la Teamgeist (Alemania 2006), la Fevernova (Corea/Japón 2002), la Tricolore (Francia 1998), la Questra (Estados Unidos 1994), la Etrvsco (Italia 1990), la Azteca (México 1986), la Tango España (España 1982), la Tango Argentina (Argentina 1978), la Durlast (Alemania 1974) y la Telstar (México 1970).
En realidad, esta célebre protagonista del fútbol ya festejó su primer añito, pues su presentación oficial fue en la Copa de Confederaciones de la FIFA, que se jugó en junio del 2009 en Sudáfrica, una competencia ya habitual entre selecciones campeonas continentales, que se juega un año antes de cada Copa del Mundo.
Pero sin duda que el salto al gran escenario fue semanas atrás en Sudáfrica 2010, donde la Jabulani en 63 partidos y la Jobulani, en la final ("Jo" en alusión a la ciudad de Johannesburgo, donde se celebró el encuentro entre España y Holanda), concentró la atención, sobre todo porque desde apenas iniciada la competencia, se le atribuyeron culpabilidades en algunas equivocaciones muy marcadas de los goleros, especialmente la del inglés Robert Green, en el juego de su selección contra Estados Unidos, en el debut, hecho que le costó el puesto en los tres siguientes encuentros de la selección británica.
Fawzi Chaouchi, golero de la selección de Argelia pasó por lo mismo, cuando recibió un gol en un tiro inocente del esloveno Robert Koren y, para no buscar ejemplos solo lejos de lo nuestro, Justo Villar probó con la peor de las consecuencias, un tanto en su arco, que calcular la trayectoria de este revolucionario esférico no era cuestión sencilla, al salir a cortar un centro, del cual quedó lejos y De Rossi marcó el empate para Italia en Ciudad del Cabo en el estreno albirrojo.
¿Se equivocaron la FIFA y su proveedora Adidas en la fabricación de este balón? No, porque respetando las medidas reglamentarias de tamaño (69 centímetros de circunferencia) y peso (440 gramos), lo que se buscó es que las características del implemento ayudase a conseguir mayor cantidad de goles, que es lo único que mantendrá viva la llama del interés en el espectáculo futbolístico.
Si son los arqueros el pato de la boda para alcanzar ese objetivo, no lo será por mucho tiempo, porque como todo (a algunos les agrada poner como ejemplo las prótesis dentarias) solo incomoda al principio y pronto llega el acostumbramiento y la familiarización.
Diego Barreto, integrante del plantel albirrojo en Sudáfrica 2010 y actual capitán de Cerro Porteño, le quitó dramatismo al tema cuando al anunciarse que desde la segunda fecha del torneo Clausura se usarían las pelotas Jabulani, al apuntársele que tendría ventaja sobre sus demás colegas, porque ya tenía casi dos meses entrenando con ella, respondió que "no hay tal ventaja, porque a todos les llevará un par de días acostumbrarse, así como me ocurrió a mí. No hay muchos secretos; es una pelota nueva y como tal tiene sus características innovadoras, nada más".
En dos fechas jugadas, hasta el momento nadie se ha atrevido a buscar disculpas con una cerrada descarga de acusaciones contra las características del balón, aunque se debe decir que los buenos rematadores, como el brasileño Inca (Sol de América), el cerrista Jorge Núñez y el liberteño Manuel Maciel ya han asociado sus recientes conquistas con la capacidad inédita de impulsión a gran velocidad que posee este.
Según un estudio realizado nada menos que por la NASA, se comprobó que, enviada a más de 72 kilómetros por hora, la pelota Jabulani describe una trayectoria impredecible, lo que alienta a quienes confían en la fuerza de sus disparos, se asocien a esta particularidad, para alcanzar la meta principal del juego, que es el gol.
Varias ligas de todo el mundo emplean este balón en sus campeonatos oficiales, como las de España, Alemania, Sudáfrica, Japón, Argentina, Paraguay, Bolivia, Ecuador, Honduras, entre otras.
En todo caso, la Jabulani es una pelota tecnológica y de avanzada, así como lo fueron en su momento la Teamgeist (Alemania 2006), la Fevernova (Corea/Japón 2002), la Tricolore (Francia 1998), la Questra (Estados Unidos 1994), la Etrvsco (Italia 1990), la Azteca (México 1986), la Tango España (España 1982), la Tango Argentina (Argentina 1978), la Durlast (Alemania 1974) y la Telstar (México 1970).
