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Estrenar casa nueva es una linda manera de celebrar un centenario, y es esa la forma en que la vieja Escuela Nacional de Comercio N°. 1, fundada un 1 de abril de 1906, lo hace.
Antecedentes
Una fresca noche de mayo de 1901, cuatro jóvenes empleados, sentados en un banco de la plaza de la Constitución, en la Costanera, decidieron fundar una entidad que bregara por la defensa de los derechos de los empleados de comercio.
Aquellos pioneros fueron Juan Z. Campos, Francisco Campos, Benjamín Mercado y Alfonso B. Campos. Luego de algunas reuniones preliminares, se realizó la asamblea fundacional de la Sociedad de Socorros Mutuos de Empleados de Comercio, el 4 de octubre de 1901. En esa misma reunión se eligió para presidirla al joven Guillermo Sosa, y como secretario a Alfonso Belisario Campos.
Al año siguiente se incorporó a esta novel entidad gremial don Jorge López Moreira, quien enseguida nomás se convirtió en el más entusiasta animador de las actividades de la institución. Asumió la presidencia y como tal, impulsó numerosas acciones en pro del gremio de empleados de comercio: la edición de revistas, la formación profesional de los miembros, y fue también el principal promotor de la fundación de la Escuela de Comercio.
Otra iniciativa loable del doctor López Moreira a través de la Sociedad de Empleados de Comercio fue lograr la jornada laboral de 8 horas, cuando se acostumbraba explotar a los empleados en turnos de 10 a 12 horas diarias. También implantó el mutualismo entre los asociados, la consecución de empleos, subsidios por desocupación y enfermedad, gastos de inhumación y, lo más importante, la consecución de la sanción de la Ley de Descanso Dominical, promulgada en 1902. Por todo lo expuesto, podemos afirmar que el papel desempeñado por la Sociedad de Empleados de Comercio fue muy importante en la historia de las luchas sociales de nuestro país.
Orígenes
No solo la defensa por los derechos gremiales preocupaba a la Sociedad de Empleados de Comercio y a su dinámico presidente, secundado en la secretaría por don Alfonso Belisario Campos. Para la formación profesional de los empleados de casas comerciales, la Sociedad de Empleados de Comercio propició la fundación de una escuela para la formación de peritos comerciales. Así surgió la Escuela de Comercio, fundada hace una centuria y bautizada con el nombre del profesor Jorge López Moreira. Estuvo dirigida por don Juan Campos. En ella, el estudiantado aprendía nociones de contabilidad, castellano, aritmética y francés.
Durante algún tiempo, la escuela funcionó precariamente en varios locales, hasta que en 1909 fue anexada al Colegio Nacional de la Capital, en su viejo local de las calles Eligio Ayala, entre Yegros e Iturbe. En 1913 egresó la primera promoción de contadores públicos, que vino como anillo al dedo en un momento en que las actividades comerciales estaban en plena expansión, gracias a la tranquilidad social que siguió luego de varios años de anarquía política.
Tortuosa existencia
En 1931, a raíz de los acontecimientos de octubre de ese año y que tuvieron como protagonistas a los estudiantes que cursaban en ese añejo local -Colegio Nacional de la Capital, Colegio Nacional de Niñas y Escuela de Comercio-, esta última fue nacionalizada, convirtiéndose en Escuela Nacional de Comercio N°. 1 "Jorge López Moreira".
Hasta el momento de su nacionalización, de la vieja escuela de comercio egresaron 362 profesionales que fueron incorporándose a numerosas empresas, firmas industriales y casas comerciales. Los años de la guerra paraguayoboliviana fueron una prueba de fuego para la institución, que tuvo que modificar sus métodos de formación profesional, lo que la llevó a una jerarquización tal que estaba conceptuada como una de las mejores del continente. Aunque muchos de los estudiantes tuvieron que dejar lápices, cuadernos y libros, y pasar a empuñar fusiles y otras armas, alejándose hacia los polvorientos cañadones chaqueños.
Cuando el CNC se mudó a su local propio, sobre la avenida Eusebio Ayala, a principios de los años 50, compartió la sede con el Colegio Nacional de Niñas, hasta que, en 1992, se mudó al ex local del Liceo Militar Acosta Ñu. En 1955, el Gobierno nacional, por medio del Ministerio de Educación y Culto resolvió denominar la promoción de ese año de todas las escuelas de comercio del país, con el nombre del profesor Alfonso B. Campos. Desde ese mismo año, la vieja Escuela Nacional de Comercio N°. 1 "Jorge López Moreira", pasó a denominarse con el de su antiguo director y principal promotor: "Alfonso B. Campos". Hoy, a medio siglo de aquel justiciero acto, la vieja escuela cumple un siglo de existencia, pero con bríos dignos de entusiastas jóvenes.
Profesor Alfonso Belisario Campos
Actualmente, la escuela lleva el nombre de uno de sus fundadores y discípulo del maestro que propició el establecimiento de la escuela, el profesor Alfonso Belisario Campos.
Nació en Asunción el 4 de mayo de 1881, hijo de Manuel L. de Oliveira Campos y María de Jesús Fernández. Huérfano a temprana edad, su infancia fue muy dura. Aun así, se esforzó por estudiar y desde joven se destacó como líder estudiantil. Apenas contaba con 15 años cuando integró el grupo fundador del Centro Estudiantil. Cofundador de la Escuela de Comercio, llegó a dirigirla a lo largo de muchos años.
Don Alfonso luchó denodadamente por la jerarquización de la profesión de contadores públicos, convirtiéndose en un combativo gremialista. Ejerció diversos cargos públicos y consulares, y la docencia en varias instituciones. Falleció en Asunción en 1961.
Recordados maestros
Algunos de los nombres que registra la historia de la Escuela Nacional de Comercio "Alfonso Belisario Campos", son los de Jorge López Moreira, Juan y Alfonso Belisario Campos, Pastor Ibáñez (recordado ingeniero), Manuel Irala, Cipriano Ibáñez (ex intendente y ex ministro), Delfín Chamorro, Celso R. Velázquez, Lorenzo Pérez Velloso, Víctor Rojas (ex ministro de Defensa Nacional durante la Guerra del Chaco). Antonio Sosa (dirigente colorado), Justo Pastor Benítez (historiador y ex canciller), Pedro Pablo Caballero (jurista), Inocencio Lezcano, Estanislao Pereira, Alfredo Jacquet (ex ministro), Marcelino Galiano, Julio Frontanilla, Ramón Vallory y célebres maestras, como Elisa Ugarrisa, Rosa Ventre, entre otras.
Radiografía
La Escuela Nacional de Comercio N°. 1 "Alfonso Belisario Campos", desde hace 11 años viene implementando el bachillerato técnico en contabilidad. En 1998 inició el bachillerato técnico en administración y desde el año pasado, el bachillerato técnico en mercadotecnia. Los cien años de existencia la sorprenden con nada menos que 54 secciones distribuidas en tres turnos -mañana, tarde y noche-. Cuenta con 1.350 alumnos. El cuerpo directivo, técnico, docente, administrativo y de servicios lo conforma una nutrida familia de unos 240 funcionarios. El director general es el profesor Miguel Angel Marecos. Los directores de turnos son: Otilia Ríos (mañana), Miriam Pedrozo (tarde) y Américo Galeano (noche).
Antecedentes
Aquellos pioneros fueron Juan Z. Campos, Francisco Campos, Benjamín Mercado y Alfonso B. Campos. Luego de algunas reuniones preliminares, se realizó la asamblea fundacional de la Sociedad de Socorros Mutuos de Empleados de Comercio, el 4 de octubre de 1901. En esa misma reunión se eligió para presidirla al joven Guillermo Sosa, y como secretario a Alfonso Belisario Campos.
Al año siguiente se incorporó a esta novel entidad gremial don Jorge López Moreira, quien enseguida nomás se convirtió en el más entusiasta animador de las actividades de la institución. Asumió la presidencia y como tal, impulsó numerosas acciones en pro del gremio de empleados de comercio: la edición de revistas, la formación profesional de los miembros, y fue también el principal promotor de la fundación de la Escuela de Comercio.
Otra iniciativa loable del doctor López Moreira a través de la Sociedad de Empleados de Comercio fue lograr la jornada laboral de 8 horas, cuando se acostumbraba explotar a los empleados en turnos de 10 a 12 horas diarias. También implantó el mutualismo entre los asociados, la consecución de empleos, subsidios por desocupación y enfermedad, gastos de inhumación y, lo más importante, la consecución de la sanción de la Ley de Descanso Dominical, promulgada en 1902. Por todo lo expuesto, podemos afirmar que el papel desempeñado por la Sociedad de Empleados de Comercio fue muy importante en la historia de las luchas sociales de nuestro país.
Orígenes
Durante algún tiempo, la escuela funcionó precariamente en varios locales, hasta que en 1909 fue anexada al Colegio Nacional de la Capital, en su viejo local de las calles Eligio Ayala, entre Yegros e Iturbe. En 1913 egresó la primera promoción de contadores públicos, que vino como anillo al dedo en un momento en que las actividades comerciales estaban en plena expansión, gracias a la tranquilidad social que siguió luego de varios años de anarquía política.
Tortuosa existencia
Hasta el momento de su nacionalización, de la vieja escuela de comercio egresaron 362 profesionales que fueron incorporándose a numerosas empresas, firmas industriales y casas comerciales. Los años de la guerra paraguayoboliviana fueron una prueba de fuego para la institución, que tuvo que modificar sus métodos de formación profesional, lo que la llevó a una jerarquización tal que estaba conceptuada como una de las mejores del continente. Aunque muchos de los estudiantes tuvieron que dejar lápices, cuadernos y libros, y pasar a empuñar fusiles y otras armas, alejándose hacia los polvorientos cañadones chaqueños.
Cuando el CNC se mudó a su local propio, sobre la avenida Eusebio Ayala, a principios de los años 50, compartió la sede con el Colegio Nacional de Niñas, hasta que, en 1992, se mudó al ex local del Liceo Militar Acosta Ñu. En 1955, el Gobierno nacional, por medio del Ministerio de Educación y Culto resolvió denominar la promoción de ese año de todas las escuelas de comercio del país, con el nombre del profesor Alfonso B. Campos. Desde ese mismo año, la vieja Escuela Nacional de Comercio N°. 1 "Jorge López Moreira", pasó a denominarse con el de su antiguo director y principal promotor: "Alfonso B. Campos". Hoy, a medio siglo de aquel justiciero acto, la vieja escuela cumple un siglo de existencia, pero con bríos dignos de entusiastas jóvenes.
Profesor Alfonso Belisario Campos
Nació en Asunción el 4 de mayo de 1881, hijo de Manuel L. de Oliveira Campos y María de Jesús Fernández. Huérfano a temprana edad, su infancia fue muy dura. Aun así, se esforzó por estudiar y desde joven se destacó como líder estudiantil. Apenas contaba con 15 años cuando integró el grupo fundador del Centro Estudiantil. Cofundador de la Escuela de Comercio, llegó a dirigirla a lo largo de muchos años.
Don Alfonso luchó denodadamente por la jerarquización de la profesión de contadores públicos, convirtiéndose en un combativo gremialista. Ejerció diversos cargos públicos y consulares, y la docencia en varias instituciones. Falleció en Asunción en 1961.
Recordados maestros
Radiografía
La Escuela Nacional de Comercio N°. 1 "Alfonso Belisario Campos", desde hace 11 años viene implementando el bachillerato técnico en contabilidad. En 1998 inició el bachillerato técnico en administración y desde el año pasado, el bachillerato técnico en mercadotecnia. Los cien años de existencia la sorprenden con nada menos que 54 secciones distribuidas en tres turnos -mañana, tarde y noche-. Cuenta con 1.350 alumnos. El cuerpo directivo, técnico, docente, administrativo y de servicios lo conforma una nutrida familia de unos 240 funcionarios. El director general es el profesor Miguel Angel Marecos. Los directores de turnos son: Otilia Ríos (mañana), Miriam Pedrozo (tarde) y Américo Galeano (noche).