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Lo que nació como una charla informal en uno de los pasillos de la Universidad de Indiana, en Bloomington, Estados Unidos, se ha convertido en un proyecto que llevará a dos jóvenes paraguayos a una travesía por el continente americano, de Norte a Sur. “Le comenté a un compañero de casa, allá en la universidad, que estaba por comprar un auto y que estaba pensando en cómo traerlo hasta Asunción. Fue ahí que me preguntó por qué no venía manejando. Pero en ese entonces la idea quedó como algo muy remoto, lejano o prácticamente imposible”, recuerda Alberto Samaniego, integrante de este intrépido dúo y que actualmente se encuentra cursando una maestría en Diseño de Interacción Humano-Computador.
Por ser amigos y pertenecer a la misma camada de becarios Fulbright, Alberto le comentó el proyecto a Juan Carlos Pane —Juanqui, para los que lo conocen—, quien de inmediato se mostró entusiasmado y decidido a acompañar la idea. “Nosotros estamos muy conscientes de que la mejor calificación para la gente no es lo que uno hace, sino lo que uno sabe y para saber nosotros estamos convencidos de que uno necesita salir del país, ver el mundo. Yo creo que a esta altura la gente ya sabe que no tenemos fronteras, todo está tan globalizado que necesitamos saber con quién competimos. La información es poder, en el buen sentido de la palabra”, declara Juanqui, quien posee un diploma en leyes y actualmente cursa estudios de Ciencias Políticas en la Universidad de Misuri, Estados Unidos.
De tierra adentro
Alberto y Juanqui coincidieron en que Un viaje al interior es el nombre que mejor identifica los ideales que motivan este largo viaje, que en un principio está calculado en base a cinco meses de duración. El recorrido, que incluye 17 países y más de 40 ciudades, surge como respuesta a la pregunta que todo becario se realiza al terminar un programa de estudios en el país: ¿qué hacer al volver? “La respuesta obvia sería regresar volando y reinsertarnos lo más rápido posible en el mercado laboral, readaptándonos a la vida rutinaria que, por lo general, predomina en el mundo profesional”, dicen. Pero en vez de tomar un avión y pisar tierra paraguaya en nueve horas, decidieron emprender una larga travesía por tierra de manera a poder captar experiencias de aprendizaje únicas y compartirlas con otras personas, motivándolas a que emprendan su propio viaje al interior.
“Ya que los dos somos estudiantes de intercambio, y conocemos gente acá y en otros lugares de Latinoamérica que tienen muchas ganas de viajar, pero no se animan, quisimos ayudar a romper prejuicios. Por un lado está la parte económica, gente que dice que porque es caro ya no se puede, siendo que hay oportunidades, hay becas, hay muchas formas de solucionar eso. También el idioma; mucha gente no se va a estudiar a otro lugar porque no conoce el idioma que se habla afuera, pero sin embargo allá uno conoce gente que se fue con un manejo muy básico del idioma y aprendió”, refiere Juanqui.
Compartir conocimiento
Alberto y Juanqui aseguran que uno de los objetivos primordiales de este viaje es compartir experiencias particulares para despertar la curiosidad por viajar, crecer, conocer y animar a las personas a buscar oportunidades más allá de sus límites. “Sabemos que muchas otras personas también tienen experiencias extraordinarias que compartir. Cada persona tiene una lección de vida particular que contar", dicen.
“Entonces quedamos en que mientras recorremos vamos a ir a animarle a la gente; vamos a dar charlas en las escuelas, en los colegios, universidades. Vamos a contar nuestras experiencias y la de los amigos que tenemos, que conocemos también, de paraguayos que están en Harvard o en el Instituto Tecnológico de Massachusetts. Mucha gente piensa que el que se va a estudiar allá es alguien extraordinario ya de por sí, pero cuando uno conoce a esta gente se da cuenta de que somos todos iguales. Entonces, es solo cuestión de animarse”, finaliza Alberto.
Hoja de ruta
La travesía de Alberto Samaniego y Juanqui Pane está prevista para el 1 de junio, luego de que ambos hayan culminado sus respectivos programas de estudio. Actualmente se encuentran abocados a la recaudación de fondos a través de auspicios o a través del sistema de financiación de proyectos en internet conocido como crowdfunding.
Realizarán el viaje por vía terrestre y se hospedarán en casas particulares mediante la red Couchsurfing, en hostales y posadas. Las charlas y entrevistas serán concertadas mediante contactos con las Asociaciones Fulbright de los diferentes países a visitar.
Sepa más en
http://unviajealinterior.org
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