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Su casa en la Perla del Sur es una verdadera obra de arte. En las paredes cuelgan los trabajos de este artista que se muestra como un entusiasta del ecositema, en especial por los bellos yaguaretés. Sus óleos de animales transmiten belleza y calma. Los colores vivos, la figura estilizada y un halo de cariño hacen que sus pinturas sean elegidas.
La evolución del artista fue rápida. Nació en Asunción, el 15 de marzo de 1954. Estudió diseño, pintura y arte en general, en Asunción, de la mano de Cira “Mirica” Moscarda; en la Escuela de Bellas Artes de Asunción y el Centro de Estudios Brasileños, también en nuestra capital. Igualmente, su pincel pasó por el Centro Cultural Paraguayo Alemán de Encarnación, con Gil Alegre. En el Brasil realizó sus estudios de Arquitectura en la Universidad Federal de Río Grande do Sul, asistiendo a atelieres de artistas como Myriam Medeiros, en Río de Janeiro, y Claudio Costa, en Porto Alegre.
Desde el 2016 hasta la fecha realiza talleres para impulsar y motivar a los jóvenes indígenas guaraníes de Itapúa, coordinado por el jesuita Ricardo Jacquet y la Asociación San Roque González de Santa Cruz - Misión Guaraní.
Moraes cuenta que su principal medio de expresión artística es la pintura, acrílica y al oleo. “Me siento cómodo con estas técnicas y mis colores son libres. Me gusta plasmar tonalidades vivas y mucha energía”.
Sus obras llegaron a galerías y museos de Asunción, como el Museo Nacional de Bellas Artes, del Correo Postal Paraguayo, Palacio Godoi en la sede de la Vicepresidencia de la República; y de las principales ciudades del Paraguay, como el Museo de Concepción, universidades católicas de Villarrica y Encarnación, UNAE de Encarnación, el Salón Nacional de San Bernardino, Bienal de Areguá, Centro Cultural Mangoré de San Juan Bautista. “Es bueno que el arte llegue a todos los puntos del país. Es una manera de instruir hacia la erudición, sin duda, la educación y la cultura son la salvación”, señala.
Muestras en Londres y Nueva York
Su trabajos son conocidos internacionalmente. De hecho, el embajador del Paraguay en Londres, Genaro Pappalardo, en ocasión de la conmemoración del aniversario de la independencia del Paraguay, le invitó a exponer en el In and Out Club de Londres, el próximo 15 de mayo. “Ya fui invitado en años anteriores y estoy muy agradecido con la deferencia. En esta oportunidad voy a exponer una serie denominada La Magia de la Selva Guaraní, destacando como siempre la naturaleza y fauna de nuestro país, principalmente aquella en vías de extinción”, explica.
Su temática ecológica expresa la dinámica entre el crecimiento tecnológico sin medidas, de consecuencia y el efecto en el mundo natural. Transforma en lienzo la magia de la selva guaraní, como una invitación para amar y respetar la naturaleza. La finalidad de su impecable técnica pictórica es esparcir el mensaje de salvar nuestro hábitat. Su trabajo ofrece un marco metafísico, que invita a despertar la conciencia de la preservación ecológica.
La artista Lucy Yegros destaca de sus obras lo siguiente: “El arte es conocimiento. Para los griegos, lo divino se revelaba espontáneamente en la forma de su propia expresión artística. La experiencia de lo bello, según Platón, implica verdad. Esa experiencia es un tiempo de celebración que nos despoja del tiempo (lineal o acumulativo) y nos sugiere lo eterno... Creo que el propósito del arte es iluminar a otros y la obra de Alfredo Moraes no solo ilumina, sino ayuda a meditar a contemplar. Es una obra de espacio místico que invita a la búsqueda de la realidad espiritual, al retorno a la naturaleza, pues somos naturaleza. Su arte es transformador y permite al espectador vislumbrar la belleza de un mundo unido”.
Desde el 3 al 27 de mayo, en la biblioteca White Plains de Nueva York, junto con otros artistas y artesanos, estará participando del evento The Arts Westchster Folk and Traditional, coordinado por el Consulado de nuestro país en Nueva York. Varias casas, además, atesoran sus pinturas.
Traspasando fronteras
Internacionalmente también expuso en el Brasil, en el Congreso Nacional e Instituto de Cultura Hispánica en Brasilia. Estuvo, igualmente, en la primera Bienal Latinoamericana de Pintura Panche-Be, en Porto Alegre. El argentino fue otro suelo que pisó como artista plástico, además de Bolivia, Inglaterra, Bélgica, España, República Dominicana, Japón, Alemania, Suiza, solo por citar algunos países.
En su haber resalta la reproducción de una de sus obras en la emisión de estampillas postales del Correo Paraguayo, denominada Pinturas Contemporáneas Paraguayas. “Fue el 12 de noviembre de 1991 y fue emocionante este hecho”.
Los premios no faltan, claro. Varias distinciones coronan su prolífica trayectoria, por su dedicación a la preservación del medioambiente y la naturaleza.
Definitivamente, la sensibilidad de su cerda es fácil de apreciar, tanto por la explosión de colores como por la sencillez. “La naturaleza, para mí, representa la vida que quiero compartir en cada detalle, para que el observador se sorprenda y se contagie de esa magia”, concluye.
ndure@abc.com.py
• Fotos ABC Color/Gentileza.