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Becas Hayes nació en el 2007 como una iniciativa del entonces embajador de los EE. UU. James Cason para proveer becas de cursos intensivos de inglés a estudiantes del tercer año de la media y universitarios sobresalientes de escasos recursos de todo el país que tengan interés en aprender el idioma como una herramienta para mejores oportunidades laborales, así como posibilidades de realizar estudios universitarios y posgrado en los EE. UU.
El curso dura dos años, y las clases se imparten en las sedes del CCPA Central y San Lorenzo. “Pero el programa es mucho más que el aprendizaje de inglés, ya que incluye varios módulos complementarios que apuntan a la formación integral de los jóvenes, como emprendedurismo, finanzas personales, preparación para el primer empleo y liderazgo”, comenta Daniel Parodi, director de la fundación.
Los chicos son seleccionados de acuerdo a la participación que tengan dentro de su comunidad. Deben tener algún tipo de relacionamiento de voluntariado, ya sea en la iglesia o cualquier otra institución. “Además, deben ser sobresalientes en sus estudios”, aclara.
La fundación cuenta con 75 becas y tan solo el año pasado se presentaron 400 postulantes. “Vienen de todo el país; tenemos chicos de Filadelfia, Caaguazú, San Bernardino, de todas partes”, agrega. Las clases se imparten todos los sábados, de 13:00 a 16:30. Lo que se requiere es constancia en el deseo de sostener, porque al principio son dos años de seguido. “No es un sacrificio menor, pero son chicos muy dedicados, enfocados en su crecimiento”.
Se dio el caso de una promoción que creó un grupo denominado Oxigen, dedicado al voluntariado. Pineda señala que hay una sinergia muy importante entre los más de 500 chicos que han sido becados gracias a los aportes proveídos por empresas y particulares. Este proyecto es implementado en conjunto con la Embajada de los Estados Unidos y el Centro Cultural Paraguayo Americano (CCPA). “Incluso, algunos han cursado la universidad en los Estados Unidos”.
Los jóvenes ingresan en un ecosistema con cuatro ejes, en los que se relacionan con gente que está dentro de la embajada, consiguen becas y son embajadores. “Con esto conseguimos que la gente hable inglés. Es la parte básica para las otras actividades ya citadas”, resalta.
El segundo eje consiste en el proyecto Finanzas Personales in Company, dirigido a empresas u organizaciones que deseen capacitar a sus colaboradores jóvenes y adultos en conocimientos y habilidades financieras. “Consiste en charlas para padres e hijos sobre el manejo del dinero, el ahorro. Es una actividad que casi nadie hace”, indica. El tercer eje radica en ofrecer charlas sobre emprendedurismo y liderazgo, así como talleres específicos acerca de comunicación, por ejemplo. Y el cuarto eje, que más impulsamos este año, el liderazgo femenino”, señala.
Para Romina Farías (22), exbecaria de Villa Elisa, fueron dos años de grandes experiencias. Estudiante de Administración de Empresas, Romina supo de la fundación a través de los anuncios. Se postuló y obtuvo la beca. “Asumir este tipo de compromiso me hizo cambiar el pensamiento que tenía como joven. Estaba en la universidad y ya trabajaba, y pensaba que no tendría tiempo para cumplir”. Pero como era consciente de que no tendría la posibilidad económica para estudiar inglés, se animó, aplicó y ganó. Romina trabaja como voluntaria en un comedor.
A partir del 2015 se implementaron las actividades extracurriculares, como los talleres. La beca que consta de dos niveles: principiantes e intermedio, y la Beca Hayes para avanzados, los que ya hablan bien el idioma, pero desean aplicar para el examen Toefl para acceder a las universidades. “Lo que más me gustó de la beca es que desarrolla el pensamiento crítico y la responsabilidad social”, explica la becaria Sandra Sanabria (22), de Fernando de la Mora. Sandra también accedió a la beca Ugrad para estudiar cuatro meses en los EE. UU. “Además, gracias al nivel de inglés que recibí con la Beca Hayes, obtuve la beca de un semestre completo en la universidad para estudiar Relaciones Internacionales. La ventaja es que te permite ingresar en un ecosistema que ayuda, incluso, a no solo obtener trabajo, sino, principalmente, sobresalir”, resalta. Sandra trabajó como intérprete el año pasado durante el Rally Dakar y también consiguió un puesto de docente en un instituto de idiomas.
La becaria Camila Narváez (22), de Luque, define la beca como un crecimiento constante. Estudiante del último año de Ingeniería en Electricidad e Ingeniería Industrial, destaca que la beca le sirvió, principalmente, para desarrollar su voluntariado. “El contacto con los becarios te incita a servir, porque liderar es servir”, asegura y agrega que sueña con realizar un posgrado en Ingeniería en los EE. UU.
Daniel Parodi enfatiza en que es necesario que se conozcan los resultados, para que más empresas se sumen a colaborar con la fundación y así cumplir más sueños.
La Fundación AmCham
Es una entidad sin fines de lucro que busca apoyar y estimular la educación de los niños, jóvenes y adultos del país; fomentar la responsabilidad social empresarial (RSE) y el desarrollo con igualdad de oportunidades. A lo largo de sus 22 años, la fundación ha puesto especial interés en temas sobre juventud, educación económica y financiera, preparación para el empleo y fomento al emprendedurismo. Si desea apoyar el programa de Becas Hayes o adquirir el paquete de capacitaciones de Finanzas Personales In Company, puede comunicarse al (021) 212-598 o escribir a fundacionamcham@pamcham.com.py.
Becas Hayes
La Fundación Cámara de Comercio Paraguayo Americana (AmCham) convoca a las empresas y personas que deseen apoyar el programa Becas Hayes, como parte de su responsabilidad social. Las becas están dirigidas a jóvenes sobresalientes de escasos recursos. Las habilidades que se fomentan son las relativas al crecimiento profesional y personal de los becados, como liderazgo, educación financiera, emprendedurismo, habilidades interpersonales con foco en lo laboral, entre otros temas. Este año, el costo de cada beca es de G. 6.072.000, que incluye dos años de clases de inglés, seminarios profesionales, libros y los otros gastos del programa. Gracias al aporte de las empresas, unos 500 chicos fueron beneficiados y, junto con el de la Embajada de los Estados Unidos, totalizan 2000 becados.
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Twitter: @FundacionAMCHAM
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Fotos: ABC Color/Claudio Nicolás Ocampo.