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También depende de las tradiciones y de la cultura en la que se está, lo que para una comunidad puede ser considerado buenos modales, en otra puede verse de mal gusto, incluso como una falta de respeto. Por ejemplo: en Japón se toma la sopa sorbiendo el plato, no con cuchara, lo que en otras partes del mundo, puede ser visto como desagradable.
¿Dónde quedaron los buenos modales? Por un lado la gente vive apurada, estresada, y esto hace que no pueda detenerse a pensar en el otro. Por otra parte, nos sentimos inseguros todo el tiempo, eso genera una fantasía persecutoria que deriva en un comportamiento antipático y defensivo Ya nadie se molesta en pedir algo por favor y quedó olvidado el decir muchas al recibir algo.
La inseguridad provoca que las personas se vuelvan desconfiadas, se sientan perseguidas, y que muchas acciones que antes parecían normales hoy se dejan atrás, como la cortesía y las buenas formas.
Si tiene algún buen tino y la buena memoria de recordar los nombres, cuando debe presentar a personas, lo que dicta el antiguo protocolo es que hay que presentar el hombre a la mujer y la persona más joven a la de más edad. A continuación el sentido de las buenas maneras dictamina que el hombre siempre debe ponerse de pie para saludar aunque sea a otro hombre. En cambio la mujer debe permanecer sentada aunque le presenten al mismísimo Presidente de la República. Las despedidas son todo un tema. Si la reunión es más bien informal, está permitido despedirse a la francesa, es decir, retirarse de la reunión en forma discreta sin despedirse de nadie. Cuando nos encontramos con alguien que nos reconoce pero es evidente que no recuerda nuestro nombre, lo ideal es decirle yo soy Ana Gallardo y nos conocimos en la casa de los Monterey. Las presentaciones son una ocasión encantadora para escuchar un festival de hipocresías: Le presento a la mujer más hermosa de nuestra ciudad, o le presento a nuestra futura premio nobel de literatura. Eso de encantada, mucho gusto ya no se usa. Un simple qué tal con una sonrisa ya lo cubre todo.
Por último y a modo de ayuda memoria, aquí va una lista de buenas costumbre en todas partes del mundo: ayudar a las personas mayores, saludar a los demás cuando se llega a un lugar, ser puntual, taparse la boca para estornudar, disculparse si se cometió un error.
Y para finalizar este opúsculo algo anticuado,recordemos lo que decía Mark Twain: La buena educación consiste en callar lo bueno que pensamos de nosotros mismos y olvidar lo malo que sabemos de los demás.