Cargando...
Muy pocas veces, en la última década las Cataratas del Iguazú, compartidas entre Brasil y Argentina, han tenido que decir “no” a sus visitantes como consecuencia de los estragos de la naturaleza. Antes por sequía y hoy por el enorme caudal de agua que ha inundado incluso algunas instalaciones del lado argentino.
Lea más: Reabren cataratas en el lado argentino tras crecida
A finales de octubre, por prevención se cerraba el acceso a la famosa Garganta del Diablo y paulatinamente se fueron cerrando otras atracciones. De acuerdo a las estimaciones publicadas en medios internacionales se registraron caudales de hasta 16 veces superior al habitual, debido a las fuertes lluvias que cayeron en el sur de Brasil, reportaba la Companhia Paranaense de Energía (Copel).
En ese contexto agregaba que las Cataratas, uno de los lugares más visitados de la región y que comparten Argentina y Brasil, acumularon 24,2 millones de litros por segundo en su momento más álgido, cuando el caudal normal es de 1,5 millones de litros.
De acuerdo a lo cables, especialistas atribuyen los desastres al fenómeno climático llamado El Niño. “Las lluvias en Brasil y los torrentes que bajan desde río arriba también afectaron los circuitos turísticos de las Cataratas, que han registrado un caudal de agua histórico”, reportaba la agencia EFE a finales del mes de octubre.
Lea más: Cierre preventivo de las cataratas ante impresionante crecida
El reporte agrega que la pasarela que da acceso al mirador Garganta del Diablo fue clausurada por cuestiones de seguridad, decisión que los responsables del parque natural también tomaron a mediados de octubre por las mismas razones.
En contrapartida, de este enorme caudal de agua, en Brasil continúa la sequía llevando a los cauces a sus mínimos históricos como en el estado de Amazonas.
Buenas noticias
Pero por el otro lado, luego del susto, las Cataratas del lado argentino ya han reabierto sus puertas de manera paulatina a inicios del mes de noviembre después de una evaluación de las condiciones de seguridad realizada por la empresa concesionaria del Parque Nacional Iguazú.
“Según la inspección técnica realizada por el personal, se han dado las condiciones de seguridad para habilitar los circuitos superior e inferior el viernes 3 de noviembre, después de la crecida extraordinaria del río Iguazú”, informó un comunicado emitido a través de las redes sociales por el Parque Nacional de Iguazú.
Las agencias detallaron que durante los primeros días de reapertura, los turistas podrán visitar la totalidad del mirador del circuito inferior y parcialmente el circuito superior, que sufrió daños en algunos tramos debido a la crecida. Con esto, los visitantes podrán disfrutar de la impresionante fuerza de la naturaleza a través de saltos como Dos Hermanas, Chico, Ramírez, Bosseti, Adán y Eva, Bernabé Méndez y Salto Mbiguá.
Para quienes quedaron con las ganas de disfrutar del espectáculo natural, el Parque Nacional Iguazú también informó que las personas que habían adquirido sus entradas con anticipación antes del cierre podrán utilizarlas en un plazo de 12 meses.
La Garganta del Diablo seguirá cerrada
Según el comunicado del cual se hizo eco la agencia EFE, hasta el momento se podrán realizar paseos en los dos circuitos, ya que la evaluación de los daños de la pasarela que conduce hasta la Garganta del Diablo, el principal atractivo de las Cataratas, se realizará cuando el nivel actual del río esté por debajo de 10.000 metros cúbicos por segundo. En la actualidad, el nivel se mantiene por encima de los 12.000 metros cúbicos por segundo.
El fin de semana capturaron el momento en que un tramo de la pasarela de la Garganta del Diablo fue arrastrado por la corriente. Sin embargo, los expertos explicaron que se trata de un sistema que permite el desprendimiento de la estructura metálica de los pilotes a fin de evitar daños en el hormigón.
Este sistema de protección cuenta con cables de acero para que las estructuras arrancadas de los pilotes no sean llevadas aguas abajo.
Justamente, en las redes sociales del parque los visitantes se hacen eco de las medidas para preservar la seguridad. “Me parecen excelentes las medidas que toman para la seguridad del visitante”, escribe la usuaria Susana Fernández en un posteo de la página oficial de Facebook de las Cataratas del lado argentino. Aunque también hay otros visitantes indignados por no poder acceder a la atracción.
Mientras las caídas siguen escupiendo caudales de agua colorada, el equipo de seguridad, contingencia y los encargados del parque se encuentran trabajando en la reconstrucción de la parte desprendida y en el monitoreo del caudal de agua como para ir viendo que otras estrategias implementar para que el flujo de visitantes se mantenga y vaya subiendo de manera gradual.
Debido a que el lado argentino es el más afectado, los usuarios de la plataforma Facebook intercambian consejos y opiniones, la más recurrente tiene que ver con ir hacia el lado brasileño para poder ver el espectáculo. “Cruzate a Brasil, ¡se ven bárbaras!”, aconseja por otro lado Daniel Eduardo Villar.
Como sea, la seguridad prima en estos casos, ya que el comportamiento de la naturaleza es impredecible y es mejor resguardarse antes que tomar riesgos que pueden lamentarse posteriormente.
Un poco de historia
De acuerdo a la historia fue el adelantado español Álvar Núñez Cabeza de Vaca quien “descubrió” las Cataratas en el año 1542 mientras cruzaba desde el océano Atlántico hasta Asunción, Paraguay. El explorador las bautizó con el nombre de “Saltos de Santa María”. Pero antes de eso, documenta la historia, el primer europeo en divisarlas fue Alejo García en 1524. Tiempo después, el salto fue bautizado con el nombre guaraní de Yguasu, gran caudal de agua. Se escribe también Iguazú.
La Gran Jota inversa
Según el sitio del consejo de turismo de Argentina, “las Cataratas se hallan dispuestas en forma que parece una gran “J” inversa. En la margen derecha (norte) se encuentra el territorio brasileño, el cual posee poco más de un 20% de los saltos de dichas cataratas; y del lado izquierdo (sur) se hallan los saltos argentinos, los cuales conforman casi un 80% de las cataratas. Para conocer completamente y apreciar del todo estas cataratas, la recomendación es visitar tanto el lado argentino como el brasileño, porque de un lado se aprecia panorámicamente el otro, y viceversa”.
Además, explica, que surge de esta distribución el dicho que “desde Brasil se ven las Cataratas, y desde Argentina se viven; desde Brasil se tiene una panorámica impactante de la mayoría de los saltos, los cuales pueden ser recorridos vívidamente del lado argentino”, refiere.
Como sea, en este momento, una de las siete maravillas del mundo está bajo la lupa global debido a los estragos que ha causado el fenómeno El Niño y el impacto sobre el turismo en la zona, donde la seguridad es el bien más preciado en este momento.
Con información de las agencias EFE y AFP. FOTOS: Agencias EFE/AFP y Redes Sociales de Cataratas del Iguazú