El dulce más refrescante

En nuestro país no hay época para tomarlos; durante todo el año hay oportunidad para degustar sabrosos helados en todas sus formas. Algunos los prefieren frutales y livianos; otros, cremosos y potentes. La oferta se amplía cada vez más y hoy también son buscados por sus propiedades nutricionales.

TENTACIÓN
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Historias sobre el origen de los helados existen muchas; hay quienes atribuyen la invención a los chinos, pues -ya hace miles de años- mezclaban nieve con frutas y endulzaban esta preparación con miel. Otros dicen lo mismo de los romanos, persas, etc. Lo cierto es que ha ido evolucionando hacia diferentes formas que hoy se consumen en el mundo entero y son preferidos por grandes y chicos.

Hoy se sabe que es un alimento que proporciona nutrientes de excelente calidad, y puede formar parte de una dieta saludable siempre y cuando se los consuma de manera ocasional y en porciones no excesivas, comenta Betharram Scarone Casco, licenciada en Nutrición, especialista en Nutrición Deportiva. “De esta manera no será un problema para el mantenimiento del peso corporal, la salud y bienestar general, ya que son considerados una fuente importante de diferentes vitaminas, energía calórica, proteínas de alto valor biológico y minerales (calcio, magnesio, sodio, potasio, etc.)”.

La nutricionista explica que el valor calórico y nutricional dependerá de sus componentes. Existen helados para casi todos los gustos y tipos de alimentación, por lo que es bueno conocer su clasificación y optar por los más adecuados en cada caso.

Pueden ser de leche, en cuyo caso el valor nutritivo se basa en proteínas de alto valor biológico, grasas (mínimo 1,5% p/p: peso de grasa en peso del producto) y azúcares, calcio y vitaminas (B2). Por otro lado, están los helados de crema o cremas heladas, elaborados a base de leche con el agregado de crema de leche o manteca (materia grasa de la leche, mínimo 6 % p/p) y, por último, están los de agua o sorbetes, con agua como componente principal. El valor nutritivo de estos últimos es inferior a los anteriores, excepto que contengan una cantidad significativa de azúcares, frutas y derivados, lo cual determinará su aporte calórico, vitamínico y mineral.

Cómo elegir el mejor

La experta señala que, desafortunadamente, algunas personas no pueden tomarlo con frecuencia, especialmente si tienen problemas con sus niveles de azúcar en la sangre. Entonces, ¿está prohibido para los pacientes que padecen diabetes? La respuesta es no, “la clave está en equilibrar, es decir, no es necesario excluir el helado u otros alimentos ricos en carbohidratos; lo ideal es adoptar una alimentación que incluya productos dulces en menor cantidad”.

La nutricionista recomienda mirar siempre las etiquetas y considerar si ese producto podría afectar su salud integral, más allá de la diabetes. Siempre es bueno buscar opciones que tengan azúcar en bajas cantidades y estas se encuentran cada vez más en sitios de abastecimiento de alimentos. Otro punto a considerar es no descartar las grasas, “el helado las contiene en grandes cantidades. Afortunadamente, la grasa reduce el índice glucémico y hace que sea menos probable que suba el azúcar en la sangre rápidamente”, aclara.

Comer sano es la clave. Si planea comer una porción de helado, haga antes una comida con muchos vegetales, grasas saludables y proteínas, y evite el alcohol, el arroz, la pasta y el pan. Combinar el helado con grasas y proteínas buenas también es una excelente manera de potenciarlo; se puede agregar nueces u hojuelas de coco, con el fin de reducir el índice glucémico del postre, sugiere.

Para completar la experiencia, la especialista recomienda moverse. Una caminata después de tomar helado ayudará al cuerpo a utilizar inmediatamente el azúcar consumido.

Tome nota de lo que se puede permitir (incluso si son industriales):

De agua

Los jugos frozen son los más ligeros, tienen un 88 % de agua. Van de 39 kcal por vaso a 95-100 kcal, según la cantidad de azúcar (siempre es preferible endulzar con stevia).

Los sorbetes tienen un máximo de 80% de agua y un 30% de aire, así es que son poco calóricos (65 kcal). Para considerarlos “de fruta” deben tener un 15% de ella.

Los sabores “al agua” (de piña, sandía, melón, frutilla) son una buena opción.

Con grasa no láctea

Los helados elaborados con grasas vegetales son más ligeros. Una bola mediana puede aportar unas 78 kcal. Otra ventaja es que no contienen colesterol ni lactosa (el azúcar de la leche). Sin embargo, la grasa vegetal utilizada suele ser de coco o de palma (principalmente saturada), por lo que abusar no es cardiosaludable.

Del fit a las hierbas medicinales

Alan Sotto Delmás y Andrea Peter son los creadores de Sotter Helados. Se iniciaron en el mundo de los helados hace apenas tres meses. Además de los tradicionales, también hacen tortas heladas y, próximamente, planean incluir una variedad de copas heladas para deleitar a los fanáticos de lo frío. Cuentan que los sabores que más les piden son cookies, americana y almendrados.

Además, ellos ofrecen helados palitos fit, con ingredientes sumamente delicados. Estos los diferencian, ya que son aptos para celiacos, son libres de gluten, sin azúcar, libres de lactosa, sin grasas trans y, además, bajos en calorías, por lo que son los preferidos de deportistas y quienes quieran cuidar la figura o tengan algunas restricciones alimentarias.

Otra emprendedora que se animó a lanzarse con su línea de helados es Leidy Recalde, quien cuenta con la ayuda de Clara Arzamendia, ambas de Coronel Oviedo. La iniciativa nació a raíz de dar respuesta a la necesidad de ofrecer helados naturales, artesanales, nutritivos y con un toque de identidad paraguaya. “Ofrecemos helados en palito artesanales a base de frutas de estación y plantas medicinales, además son endulzados con miel de abeja y ka’a he’ê. No utilizamos azúcar procesada, y las frutas tanto como las plantas medicinales son totalmente frescas”, explica.

Ya cuentan con diez sabores diferentes, los cuales se fueron formulando con la ayuda de nutricionistas. Incluyen mango nacional, frutilla, naranja con azafrán, piña, cedrón Paraguay, cedrón kapi’i, menta’i, entre otros, como el detox (que contiene manzana verde con pepino). Comenta que todos estos son aptos para intolerantes a la lactosa.

También cuentan con opciones keto.

Aclara que los ingredientes que utilizan son de primera calidad y se proveen de productores locales, en general mujeres y jóvenes emprendedores de la zona.

“A las personas les encanta que además de consumir algo saludable, sea artesanal y tenga ese toque identitario de nuestra cultura paraguaya”, resalta.

Leidy comenta que forma parte de la Academia de Mujeres emprendedoras AWE Academy for women Entrepreneurs Paraguay, y su emprendimiento fue seleccionado y ha ganado en numerosos concursos nacionales.

¿Ya probaste alguno?

alba.acosta@abc.com.py

Portada: virtu studio/shutterstock.com

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