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El gobierno de Mario Abdo Benítez decidió el 10 de enero pasado romper relaciones diplomáticas con el régimen venezolano de Nicolás Maduro porque desconoce su legitimidad, producto de elecciones fraudulentas en mayo del 2018. En consecuencia, el Mandatario ordenó el cierre de la Embajada de Paraguay en Caracas y el retiro del personal diplomático.
El Ministerio de Relaciones Exteriores comunicó esa decisión al embajador venezolano en Asunción, Alfredo Murga, para que en un plazo razonable no mayor a 15 días (que vence este viernes) abandone el país y retire a todo el personal diplomático y consular venezolano dentro del territorio nacional.
El plazo vence este viernes 25 de enero y el embajador Murga y sus funcionarios dieron cumplimiento al plazo del Gobierno paraguayo y cerraron la representación, que está ubicada en el residencial barrio Las Carmelitas de Asunción.
El vicecanciller nacional Hugo Saguier Caballero informó en su momento que el embajador Murga tiene una esposa paraguaya, a quien conoció en el país. También aclaró que el personal diplomático no fue expulsado; fue invitado a abandonar el país.
Atención consular
La Cancillería estimó que 83 compatriotas están registrados en Venezuela, de los cuales 14 son estudiantes. También fueron activados los mecanismos de asistencia a aquellos paraguayos que residen en el país caribeño tras la ruptura de relaciones. Los compatriotas pueden acudir para realizar gestiones en el consulado de Uruguay en Caracas porque la Embajada paraguaya en Venezuela cerró sus puertas y el encargado de negocios interino Santiago Riquelme regresó al país.
El Gobierno también anunció días atrás que los venezolanos residentes en Paraguay tendrán atención especial, ante la ruptura de relaciones diplomáticas con el régimen de Maduro.
Las mesas de atención estarán instaladas en la Secretaría General del Ministerio del Interior, en la Dirección de Migraciones y en el Departamento de Identificaciones de la Policía Nacional. Unos 1.000 venezolanos residen en el país.