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La institución dejó en claro que las afiliaciones y los padrones partidarios son de exclusivo manejo de las agrupaciones políticas. La única participación del TSJE es certificar dichos padrones. “El procedimiento de certificación consiste en el cruzamiento de datos para excluir a los fallecidos, las personas que tengan condenas judiciales, policías y militares en servicio que figuran en los padrones partidarios. Estos son devueltos a los tribunales partidarios correspondientes para su depuración”, explicó Sergio López, vicedirector de Registro Electoral.
Agregó que en un segundo corte se vuelven a cotejar los datos con los del Registro Cívico Permanente (RCP) para verificar quiénes están inscriptos, posteriormente la Dirección de Registro Electoral certifica los padrones y corre a cuenta de los partidos la exclusión de las personas con doble o triple afiliación.
“La Justicia Electoral mantiene firme su postura de respaldar y salvaguardar la autonomía de las agrupaciones políticas, que son los únicos encargados y responsables de depurar permanentemente sus padrones como se menciona en el Código Electoral, a partir del Artículo 51”, explicó López.
Hablan de fraude
Medios digitales de Cuba y Venezuela aseguran que las afiliaciones falsas en la ANR denunciadas en el inicio del proceso electoral 2013 embarran la transparencia de los comicios e incluso hablan del comienzo de una estrategia de fraude. Ante las versiones de trampa electoral, que nacen de sectores socialistas de nuestro país, el coordinador general de las elecciones 2013, Carlos María Ljubetic, manifestó que tales comentarios no tienen sustento. “No se puede hablar de fraude electoral a partir de que varias personas fueron afiliadas a un partido sin el consentimiento previo. Si se comprueba que esto se realizó para cambiar la voluntad popular, llevando gente a sufragar en reemplazo de los que fueron incluidos ilegalmente en el padrón, sí se consideraría un fraude electoral. El falsificar firmas para incluir gente en un registro es sin duda un fraude, pero no electoral”, explicó el funcionario.
Reiteró que las irregularidades en los padrones para las internas son responsabilidad de los partidos.
“Avivada” de operadores
Las afiliaciones a partidos usando firmas falsas es un recurso heredado de la dictadura stronista y lleva años “haciendo historia”. La mayoría de los dirigentes partidarios, especialmente de la ANR y PLRA, obligan a sus operadores a presentar entre 30 y 100 afiliaciones por mes en períodos preelectorales. Ante esta exigencia, los operadores echan mano a la base de datos de instituciones públicas y privadas que se ofertan por internet. En cuanto a las firmas, los mismos responsables de afiliar son generalmente quienes las falsifican. Los líderes partidarios saben de este tipo de maniobras, pero no hacen nada para desalentarlas. Este procedimiento es una de las formas típicas de “inflar” los padrones partidarios.