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Hoy, el Tribunal de Sentencia presidido por Ramón Trinidad Zelaya, Janine Ríos y Benito González debe determinar cuántos años purgará “Neneco” en prisión, así como si es viable o no la aplicación de medidas de seguridad, tal como solicitó la Fiscalía. Los fiscales Sandra Quiñónez y Vicente Rodríguez pidieron 40 años de reclusión, de los cuales 30 corresponden a la pena máxima y 10 a medidas de seguridad.
La semana pasada, el presidente del Tribunal de Sentencia comunicó su decisión de declarar al político reprochable de instigar el homicidio de nuestro corresponsal en Curuguaty.
El colegiado dio por comprobado que las reiteradas publicaciones realizadas por Pablo sobre la implicancia de miembros del clan Acosta en casos de ajusticiamiento y narcotráfico, determinaron su ingreso en una “lista negra” en la que, según el testigo Casimiro Núñez, hermano del también ejecutado exintendente de Ypejhú Julián Núñez, Pablo era el número cuatro.
Zelaya destacó que quedó plenamente demostrado con el relato de distintos testigos y pruebas como publicaciones, mensajes de texto y hasta un documento redactado por el propio Pablo hallado en su computadora, que el exintendente de Ypejhú Vilmar Acosta Marques amenazó al hombre de prensa, quien incluso tuvo que vivir bajo custodia policial y con varios recaudos para realizar sus actividades diarias.
Las contundentes declaraciones del exchofer de Vilmar, Arnaldo Cabrera, quien detalló la planificación del crimen, el acompañamiento de Vilmar y finalmente su alegría cuando fue informado de la ejecución del periodista, coincidentes con el registro de llamadas entre autor intelectual y los sicarios, fueron otros elementos considerados por el Tribunal.
Pablo y Antonia fueron baleados el 16 de octubre del 2014, en un camino vecinal de Villa Ygatimí.