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En julio del año pasado, el Sindicato de Funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores presentó una nota al Ministerio de Trabajo para pedir el reconocimiento de las nuevas autoridades elegidas en asamblea, en la que fue designado Enrique Ramírez como secretario general. Después de varias idas y venidas, a fines de año el Ministerio de Trabajo emitió la resolución Nº 92 por la que no hizo lugar al pedido de reconocimiento señalando: “No procede hacer lugar el registro y reconocimiento de la Comisión Directiva del Sindicato de Funcionarios y Empleados del Ministerio de Relaciones Exteriores (Sinfuemire)... por no reunir los requisitos legales”.
Incluso, estableció que el Sindicato debía “convocar nuevamente a una Asamblea General Extraordinaria de Reorganización, observando todas las cuestiones de forma y de fondo establecidas para estos casos”.
Ramírez admitió que el sindicato que preside no tiene reconocimiento legal, pero indicó que está convocada una nueva asamblea para el próximo 23 de julio para subsanar la situación.
Explicó que el Ministerio de Trabajo no reconoció su elección porque el llamado a asamblea no se publicó en medios escritos de circulación nacional.
No obstante, aclaró que tuvo el respaldo de sus compañeros que decidieron votarlo para ser secretario general.
Comisión acéfala
En su resolución, el Ministerio de Trabajo recomendó que los socios integren una comisión reorganizadora “en razón de que la actual Comisión Directiva se encuentra acéfala”.
La semana pasada, Ramírez convocó a una reunión a los miembros del sindicato para presentar un anteproyecto de ley en que plantea modificar la norma que regula el servicio exterior e incluir automáticamente a los funcionarios con más de diez años de antigüedad al escalafón diplomático.