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En el Partido Colorado están en pleno análisis los resultados que se reportan día tras día desde la Justicia Electoral, en el juzgamiento de las actas electorales. En el entorno del presidente electo, Mario Abdo Benítez, esperan que finalicen las tareas de juzgamiento para comprobar si hubo o no “brazos cruzados” entre los dirigentes colorados.
Fuentes coloradas refirieron que existen sospechas de que la dirigencia no trabajó con todo el ímpetu en las elecciones, atendiendo las derrotas en departamentos clave para la ANR, como Concepción y Caaguazú.
En ambos departamentos el Partido Colorado perdió la Gobernación ante el PLRA y la Alianza Ganar, respectivamente. Arturo Urbieta, exintendente de Horqueta, perdió la Gobernación ante el candidato del PLRA, Édgar López. En el primer departamento había, incluso antes de las internas coloradas de diciembre pasado, una fuerte disputa entre dos grupos: El liderado por Luis Urbieta (exgobernador de Concepción y ahora diputado electo) y el actual diputado Bernardo “Lalo” Villalba, candidato a senador suplente N° 5.
En cuanto al departamento de Caaguazú, el Partido Colorado también perdió la Gobernación. El candidato de la Alianza Ganar, Alejo Ríos, derrotó al candidato colorado Édgar Olmedo.
En el V Departamento también habían fuertes diferencias entre dos equipos: Uno cartista, liderado por el diputado Mario “Baby” Soto Estigarribia y su hijo, el candidato a gobernador Marcelo Soto. También está en este grupo el parlasuriano electo Jorge Torales.
El otro sector disidente es el liderado por el senador reelecto Silvio “Beto” Ovelar. De acuerdo a los antecedentes, ambos bandos no llegaron a complementarse, al punto que el presidente Cartes tuvo que ir personalmente a pedir el trabajo coordinado entre ambos grupos.