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Giuzzio, en entrevista con radio ABC Cardinal 730 AM, criticó la eliminación en el inciso g) del Art. 62 de la prohibición a los partidos, alianzas, movimientos o concertaciones de recibir donaciones de personas acusadas por delitos graves vinculados con el crimen organizado. La prohibición, según lo aprobado, será solamente para aquellos que estén condenados. Giuzzio dijo que eso permitirá que sigan aportando sospechosos de crímenes como el narcotráfico, lavado de dinero o trata de personas.
Por otro lado, desestimó que el proyecto de financiamiento político, con las modificaciones del Senado, perjudicará a los partidos y movimientos pequeños porque no podrán cumplir con las exigencias burocráticas. Aseguró que no hay trabas exageradas que asfixien a los partidos de menores recursos. “Este país es muy informal, pero no podemos estar girando sobre esa realidad. Tenemos que apuntar hacia la transparencia, la rendición de cuentas y eso tiene su costo”, dijo.
Destacó que se haya establecido la obligación de los movimientos internos de los partidos de informar sobre sus gastos y aportantes al tribunal partidario y al TSJE, ya que este era un reclamo permanente.
Sin embargo, criticó que se haya eliminado del texto la obligación de que los movimientos individualice a sus donantes, sean personas físicas o jurídicas. El argumento para eliminar esa exigencia fue que iba en contra de la inviolabilidad del patrimonio documental y a las comunicaciones privadas, precauteladas en la Constitución Nacional.
Indicó que esto se contradice con el artículo 8 de la misma ley que establece la posibilidad de que los donantes puedan deducir impuestos por su contribución, lo cual no sería posible si no están individualizados.
No regirá en elecciones
Las modificaciones a la ley de financiamiento político que afectan a los movimientos internos de los partidos no entrarán a regir para las elecciones del 17 de diciembre, ya que la ley no estará aún en vigencia. El proyecto aprobado en el Senado volverá ahora a la Cámara de Diputados, que podrá ratificarse parcial o totalmente en su texto. De ser así, el mismo volverá a la Cámara de Senadores que tendrá la última palabra. El Senado, entre sus cambios, duplicó a US$ 140.000 el monto que pueden donar personas en forma individual.