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TACUATÍ, Dpto. de San Pedro (Omar Acosta y Aldo Rojas, corresponsales). Varios de los secuestros perpetrados por el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) fueron con fines económicos. El caso que tiene como víctima al colono menonita Franz Hiebert Wieler podría tratarse de una “prueba de fuego” para algunos nuevos militantes del grupo armado que opera principalmente en los departamentos de San Pedro y Concepción. Esto teniendo en cuenta los datos aportados por los allegados al cautivo, como por ejemplo su situación económica y que fue la primera vez que iba hacia la zona donde se produjo el plagio.
Otro dato importante es que los captores no dejaron ninguna exigencia a los familiares del colono, como generalmente lo hacen.
Si bien no habría testigos del hecho, esto hace difícil que se pueda tratar de identificar a quienes secuestraron a Hiebert. Una de las hipótesis del caso es que se trataría de una de las acciones que deben realizar los nuevos integrantes del EPP.
Para ganar el estatus de “combatientes” del grupo de secuestradores, deben participar de un hecho similar al sucedido el lunes último en la colonia Santa Clara, distrito de Tacuatí.
Los Argüello Larrea
En la noche de sábado 22 de julio pasado, los hermanos Rodrigo Argüello Larrea, de 21 años, y Jhony Argüello Larrea, de 15 años, desaparecieron misteriosamente de Arroyito.
Al día siguiente, dos de sus hermanas encontraron la motocicleta en la que se movilizaban. El biciclo no tenía el asiento y la batería y estaba tirada en una chacra.
Desde entonces, nada se sabe de los dos jóvenes que son hermanos de Luciano Argüello y Benicio Argüello, ambos miembros activos del EPP que se dejaron filmar recientemente leyendo un comunicado en el monte. Las sospechas de que Richard y Jhony se hayan sumado a las filas del grupo armado se tiene desde que la madre de ambos denunció el hecho, por lo que para algunos miembros de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) resulta lógico creer que pueden estar involucrados en este último plagio.