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FUE ALLÁ POR AGOSTO DEL 2013 cuando llevaron a Alicia Garcete –acuciada por el apriete judicial y policial del equipo de Óscar González Daher– hasta la escribanía de Cayo Estigarribia, concepcionero y aparentemente, compadre del exministro Bajac Albertini. La señora Garcete dice que la obligaron a firmar un acuerdo ante escribano por el cual ella se comprometía a pagar la suma de US$ 500.000 (unos G. 2.900.000.000 al cambio actual) por la intercesión del ministro de la Corte. Estigarribia aparece en otras denuncias que salpicaron a Bajac en el pasado; fue acusado de dar fe de que una persona murió dos veces en un escándalo de tierras.
JOSÉ ÁLVAREZ, también concepcionero, abogado y allegado a Bajac, acompañó todas las tratativas. Desde la firma del acuerdo en escribanía pasando por las dos entregas de cuotas millonarias –en efectivo– realizadas en la residencia de Bajac ubicada sobre Torreani Viera en inmediaciones de Alfredo Seiferheld. Álvarez llegó a ser candidato a concejal y en las últimas elecciones apoyó a la lista Añetete. Aparece en fotos al lado de Nicanor Duarte Frutos y de José Alberto Alderete. En su Facebook aparecen también fotos del exministro Bajac, a quien representaba. Frente a él se contaba la plata en efectivo que entregaba la familia Garcete. Fue grabado.
DOS CUOTAS MILLONARIAS EN EFECTIVO llevó Alicia Garcete hasta la residencia de Bajac sobre Torreani Viera. Entró por la puerta cerca de la garita, la dejaron esperando en un quincho donde sacó fotos. De allí caminó al costado de una pileta, pasó a una salita y terminó en una oficina pequeña y bien montada. Bajac –según denuncia Garcete– sacó el dinero y lo contó frente a ella, su esposo y el abogado José Álvarez. LA PRIMERA CUOTA fue de G. 150.000.000 y la SEGUNDA CUOTA fue de G. 250.000.000. Junto a estas entregas dieron un total de otros G. 1.200 millones que Bajac iba sugiriendo entregar a abogados de su entorno.