Cargando...
Francisco Rivera, de profesión director técnico, casi siempre anda armado y responde a la vieja escuela del coloradismo, en que con prepotencia busca amedrentar y hacer de menos a sus adversarios, dijeron fuentes que no quisieron identificarse debido a que el seccionalero, además, infunde temor. Ahora busca levantar a los presidentes de seccional de Central para reclamar cargos al nuevo gobierno.
Rivera fue concejal municipal ya en dos periodos anteriores, e incluso llegó a ser nombrado, en el 2004, cónsul en la ciudad de Posadas, durante la administración del entonces presidente colorado Nicanor Duarte Frutos (2003-2008)
Nuevamente, pudo ingresar como concejal de la mano del senador Julio César Velázquez, actual presidente del Congreso, ya que integró la lista de concejales del hermano del legislador Blas Velázquez, candidato en las elecciones pasadas a intendente.
De apoyar a Horacio Cartes, pasó rápidamente a la carpa de Javier Zacarías Irún, con la promesa de que sería diputado, pero al no concretarse su candidatura volvió a carpas de Honor Colorado, liderado por el actual presidente de la República.
Rivera aprovechó su influencia de caudillo para colocar a sus tres hijos: Martín, Marcelo y Marcos Rivera Domínguez, en funciones públicas, e incluso librarlos de penas más severas en la justicia, según nuestras fuentes. Hace menos de un año, hasta atropelló la sede de la comisaría 2ª Central tras la detención de Marcos, que fue encontrado presuntamente con un moño de crack. De todas maneras, el joven fue imputado por el fiscal Antidrogas Carlos Alcaraz por el delito de tenencia sin autorización de sustancias estupefacientes.
Marcos, el menor de todos, ya estuvo preso hace unos años en el correccional Centro Educativo de Itauguá por intento de homicidio, dicen las fuentes. Debido a este antecedente, tuvo que dejar la función pública.
El hermano del medio, Marcelo, era funcionario de Copaco, y ahora cumple funciones de vicedirector de Tránsito en la Municipalidad fernandina, a cargo de su correligionario, el intendente Edgar Quintana.
El hijo del presidente de la seccional había vuelto de EE.UU. hace unos tres años para asumir como concejal, ya que figuraba como suplente del concejal Pablo Giménez (ANR), quien fue apartado del cargo tras ser procesado por coima.
El mayor de los hermanos, Martín, sigue como funcionario de la Administración Nacional de Puertos luego de salir de la cárcel de Tacumbú, donde estuvo preso por homicidio, según comentan en la Comuna fernandina. El presidente de seccional y concejal municipal es recordado porque integraba una especie de “horda colorada” para amedrentar y violentar a quien quisiera en los primeros años, tras la caída de la dictadura de Stroessner.
Ahora estaría intentando aglutinar a sus correligionarios tras cargos públicos.