Cargando...
Ante unos 900 invitados especiales que coparon el Centro de Convenciones de la Conmebol, en Luque, la princesa del Japón Mako presidió ayer el acto central conmemorativo del 80º aniversario de la inmigración japonesa a nuestro país iniciada en 1936. El presidente de la República, Horacio Cartes, asistió al evento.
Su Alteza Imperial agradeció en su discurso la hospitalidad y generosidad de los paraguayos con los inmigrantes japoneses que llegaron para trabajar por el desarrollo del Paraguay.
Deseó prosperidad para nuestro país y abogó porque las relaciones amistosas y de entendimiento mutuo entre los dos países se afiancen mucho más. “Muchas personas me han contado que la comunidad japonesa ha ganado aquí gran confianza por su desarrollo y han realizado mutuas actividades”, manifestó la Princesa al expresar su agradecimiento al pueblo paraguayo.
Por su parte, el embajador del Japón en Asunción, Yoshihisa Ueda, rememoró que la inmigración comenzó en 1936 en La Colmena, y fue interrumpida durante la Segunda Guerra Mundial, pero se reinició en la posguerra con la llegada de más inmigrantes a distintas zonas del país, como Amambay, Itapúa y Alto Paraná.
El presidente de la comisión organizadora de los festejos del 80º aniversario de la inmigración japonesa, Hiromichi Maehara, destacó el trabajo de los colonos japoneses que se dedicaron principalmente al cultivo de soja, maíz, arroz y trigo. Los inmigrantes también introdujeron la famosa carne wagyu, originaria de la ganadería japonesa.
De acuerdo a datos oficiales, aproximadamente 10.000 japoneses están asentados actualmente en el país, entre originarios, descendientes con raíces en el Japón que hoy llegan a la quinta generación.