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La confirmación de que el acto de toma de mando y juramento del presidente electo, Horacio Cartes, se hará con la presencia de los mandatarios de los otros tres países fundadores del Mercosur es una primera señal positiva que traduce en un gesto concreto la voluntad de recomponer las relaciones que habían quedado dañadas, tras la salida de Fernando Lugo y la suspensión de Paraguay como socio del bloque. Así lo entienden fuentes cercanas al nuevo presidente.
Luego de confirmarse que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, no sería invitado a los actos del 15 de agosto, debido al retiro mutuo de representaciones diplomáticas, se llegó a especular que, por “solidaridad”, los demás presidentes del Mercosur no concurrirían a la ceremonia de asunción de Cartes. Sin embargo, tal cosa no ocurrirá y la presencia de los mismos, confirmadas por escrito, es un mensaje de voluntad política para el retorno de Paraguay al bloque.
No obstante, fuentes del entorno del presidente electo puntualizaron que no habrá “retorno automático”, como plantean los demás socios del bloque, sino que deberá resolverse antes el espinoso tema de la presencia de Venezuela, concretada en ausencia de Paraguay.
Las negociaciones serán iniciadas por el nuevo canciller de nuestro país –que casi con seguridad será Eladio Loizaga– inmediatamente después de su confirmación. De hecho, algunas fuentes consultadas señalaron que ya existen conversaciones preliminares que se intensificarán inclusive antes de la asunción del nuevo presidente.
Decisión
El retorno de Paraguay al Mercosur estaría decidido por parte del nuevo gobierno de nuestro país, pero su concreción requerirá de una “ingeniería diplomática” que preserve la legalidad y asegure un “blindaje” a la imagen del gobierno.
Aunque las fuentes cercanas al mandatario paraguayo electo no adelantaron cuál sería la “fórmula”, señalaron que habrá gestos y renunciamientos de todas las partes involucradas.
Indicaron también que difícilmente se produzca la salida de Venezuela, tal como exigen sectores diplomáticos vinculados al Partido Colorado, pero que también se preservará la dignidad paraguaya, en el sentido de que no se hará nada que no tenga el consentimiento de nuestro país.
Acuerdo legislativo
Una de las claves para que se retorne al consenso dentro del bloque regional pasa por el Congreso paraguayo que, en su momento, y luego de la suspensión de Paraguay, había rechazado formalmente el acuerdo para el ingreso de Venezuela. Esta situación requerirá una suerte de “cumbre” de cancilleres de los países miembros del bloque para analizar una salida que contemple los intereses de todas las partes
Según trascendió, se apelaría al hecho de que existe un nuevo escenario político en nuestro país, surgido tras las elecciones y la asunción de un nuevo presidente, que requiere revisar posturas anteriores.
De parte del Congreso de nuestro país, ya no existe prácticamente reparo a la presencia de Venezuela en el Mercosur. Esto significa que, si el flamante Poder Ejecutivo remite al Parlamento un nuevo documento para aprobar el ingreso del país caribeño, no habría dudas para su aprobación.
No obstante, un paso de este tipo requerirá previamente un pleno acuerdo y una solución definitiva sobre los reclamos de nuestro país, que asegure también la legalidad, apuntaron las fuentes cercanas al próximo gobierno.