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–Ex jueza, exministra, ¿ahora candidata?
–Sí. Nuestro movimiento se llama Soberanía Nacional. Es un movimiento independiente. No tiene colores. El Paraguay nos llama a hacer política porque si no nos metemos se van a meter los mismos de siempre, y somos conscientes de que se ha desnaturalizado completamente los principios de la política en nuestro país.
–¿Usted es la candidata a presidenta?
–Me propusieron pero no está decidido. Voy a analizar bien con mi familia para tomar la decisión.
–¿Una candidatura testimonial?
–No. ¿Usted cree que la gente no está dispuesta a elegir una mujer? Somos un movimiento independiente con una filosofía humanista que defiende la dignidad de las personas. Para nosotros la ética es fundamental. Es lo que no existe en nuestra política. Por eso nos presentamos ante la Justicia Electoral y estamos conversando con algunos senadores como (Arnaldo) Giuzzio, (Eduardo) Petta y otras personas que han demostrado con su conducta que no forman parte de esa manada de gente impresentable que está en el Congreso.
–Es la época en que se disfrazan todos de corderos. Son mansos, angelicales..., Calé y compañía...
–Invito a todos los paraguayos a involucrarse en la política. Esta puede ser nuestra oportunidad para enfrentar a los que nos engañan con sus promesas en cada período de Gobierno. Sepan todos que del cielo no va a caer nada, salvo la lluvia. Entremos a la cancha a hacerles frente. Piensen en la mujer marginada, la anciana olvidada, la campesina trabajadora, la violentada y sus niños desamparados. Vamos a meternos en la política por ellos. Y si no nos hacen caso, por lo menos vamos a intentarlo.
–¿Está dispuesta a enfrentarse a Mario Abdo, Peña, Alegre...?
–¡Imbaretéko la kuña Paraguay! Hace falta nomás que tengamos presentes a nuestros antepasados, a aquellas héroes de la Guerra que levantaron al país de sus cenizas y a pesar de las humillaciones de los invasores. Yo he demostrado mi vocación de servicio hacia las mujeres y los niños desde mi posición de abogada de familia, de jueza, de ministra y si mi propuesta tiene eco en la ciudadanía estoy dispuesta a hacer de guía para salir de esta crisis moral. Las mujeres somos más sensibles...
–Como decía el Papa...
–“La gloriosa mujer paraguaya”, decía el papa Francisco. ¿Acaso las mujeres necesitaron de dinero para reconstruir el país después de la Guerra? No. No había nada. Salimos adelante porque la mujer tiene agallas. Es trabajadora. Es lo que queremos rescatar. Yo no demerito al varón, de ninguna manera. La familia se constituye del varón, la mujer y los hijos. Se sufre cuando la familia está incompleta y ahí sale a relucir la mujer. Ella es “valé”. Conocí a muchas de esas mujeres “valé” cuando era ministra de la Niñez (durante el gobierno de Nicanor Duarte Frutos) cuando iba a recorrer la frontera para documentar criaturas antes que lo hicieran brasileros o argentinos.
–¿Fracasaron los hombres que gobernaron?
–Yo no digo que fracasaron pero fueron débiles a la hora de aplicar la Constitución y las leyes, para solucionar los problemas, para cortar a los planilleros, para reducir la brecha de la desigualdad, para combatir la corrupción. En este país se da la paradoja que al propio contralor le tenemos que controlar porque tiene antecedentes. Se nombra por componendas políticas. Nunca en mi vida vi tantos candidatos de primer nivel para la Contraloría y la Defensoría del Pueblo. Pero a los mandamases de turno no les importó. Se reunieron y pactaron para elegir a paniaguados sin ninguna capacidad y encima con antecedentes. ¿Cómo es que la ciudadanía no se rebela contra estas injusticias? A mí me da pena. Por eso decidí lanzarme a la política.
–¿Cómo podría encarar una campaña contra candidatos de los grandes partidos?
–Las elecciones nos están dando muchas sorpresas en el mundo: Estados Unidos, Francia...
–¿Cuál es el perfil de gobernante que le inspira?
–Margareth Thatcher, Golda Meir. Fueron mujeres admirables...
–Mujeres con mucho carácter...
–Eso es lo que necesita el Paraguay, un gobernante de carácter, que se plante, si es posible una mujer de carácter que ponga orden a las cosas, de ética comprobada, valiente, que no se deje manipular, que no sea veleta ante las circunstancias, ante los intereses sectarios, que no se ponga a desestabilizar al país porque quiere la reelección y esa figura no existe en la Constitución. Necesitamos alguien que aplique la ley a rajatabla por más que le acarree problemas como a mí me sucedió muchas veces...
–Si usted llegara a mandar...
–Conmigo se va a aplicar la ley reviente quien reviente, así sea mi hijo, pariente, sea quien sea. Senadores, diputados con su parentela repartida en todas las reparticiones del Estado, conmigo van a tener problemas... Si yo fuera presidenta van a tener que irse todos...
–¿Cómo?
–Si no podemos por la ley, vamos a escracharlos hasta que se vayan. Vamos a expulsarlos como Jesús hizo con los mercaderes del templo. Senadores, diputados, ministros de la Corte, jueces, camaristas, sean del partido que fueren, se tienen que ir. Ellos mismos son planilleros al llegar tarde a su trabajo o cuando se ausentan. Este país tiene que depurarse de todos sus sinvergüenzas que viven a costilla del Estado. Aprovechemos esta elección para cambiar, pero tenemos que involucrarnos.
–Usted se estrelló cuando quiso sacar a los niños de la calle. ¿Por qué hubo tanta resistencia?
–Hoy estudia medicina una de las niñas que entró y siguió en el albergue cuando hicimos la campaña. Ella me visita y estoy feliz que le vaya bien. Valió la pena el esfuerzo.
–¿Y los demás?
–Y ahí están, delinquiendo. Muchos están en la cárcel. La calle produce delincuentes...
–¿Quiénes le cortaron la iniciativa?
–Las Oenegés. Me acusaron de cometer un atentado contra los derechos humanos. Cuando subió (Fernando) Lugo de presidente, una de esas representantes de Oenegés fue nombrada ministra de la Niñez.
–¿Quién?
–Liz Torres. Un funcionario de la Secretaría me contó después que ella tiró todos los libros de la biblioteca que formé. Pero bueno, no guardo rencor pero me llama la atención cómo el fanatismo puede desvirtuar el objetivo común que es proteger a los niños. Otro contraste: el ministro actual de la Niñez tiene antecedentes penales. Su caso se archivó porque prescribió. Muchas veces intenté hablar con el Presidente (Cartes) para decirle cómo se tiene que trabajar con los niños, pero nunca me recibió...
–¿Qué gobierno se imagina?
–Uno que priorice la familia, que proteja a los niños desde el momento que nacen. Nadie puede decir “de mi vida hago lo que quiero” y por eso tenga derecho a matar a la criatura que crece dentro de su cuerpo. ¡Ella tiene la obligación de parir! Es la ley natural. ¡Si una nació vaca y quiere volar, se va a estrellar! Lo mismo, si cortamos todos nuestros árboles nos van a venir encima los mosquitos, las pestes, se van a contaminar las aguas. La naturaleza tenemos que respetar.
–Esta semana se reunieron las ex estrellas del fútbol sudamericano. Todos coincidieron en que la formación de los niños es la clave... –Lo que pasó con Japón, en Alemania. Invirtieron en capital humano. Esos niños que quedaron huérfanos de la Guerra fueron los ingenieros que industrializaron el país y lo convirtieron en una potencia...
–¿Cómo es que muchas veces salen superdotados de la extrema pobreza? futbolistas en este caso... –Contados con los dedos. Son casos excepcionales. Podemos sacar grandes deportistas, científicos, pero hay que formarlos. Japón y Alemania no son productos del azar.
–¿Qué política aplicaría de entrada?
–Algo tan simple para explotar la inventiva de los niños como es por ejemplo poner tableros de ajedrez en las plazas, con instructores. Yo no tuve dinero para implementar eso. Los niños que inhalan cola de zapatero cuando se los desintoxica necesitan quemar sus energías en un pasatiempo. Esa clínica de recuperación que está sobre la calle Venezuela solo admite 10 personas, no más. Hay cientos que necesitan ser desintoxicados. Cuando saqué a los niños de la calle, los hice clasificar en edades de hasta tres años; de 6 a 12 años, varones aparte y niñas aparte; de 12 a 17, también hombres aparte y mujeres aparte. Los adictos tenían que ser llevados al centro de adicción, ese local que está a cargo del Dr. Fresco. pero el Centro de Adicción no los admitía. Me decían que se los podía tratar en forma ambulante. ¿Cómo puede ser ambulatoria si queremos terminar con una adicción?
–¿No había presupuesto?
–Si querían podían sacar la plata de Itaipú, de Yacyretá, esa plata que tanto despilfarran en cualquier estupidez. En este país, los niños no cuentan. Por todas estas injusticias es que estoy decidida a ir a golpear en las casas y decir a los vecinos “Chekueráima”, “Jajeheja la plagueo gui ha jaike ñamba’apo”. Les voy a decir que me voy a presentar y que si me eligen, como decía Kennedy: “Ustedes van a gobernar conmigo”.
–¿Dónde se los encuentra?
–El PC está en Juan Manuel Frutos 2634 casi Denis Roa, en barrio Herrera. El teléfono 0981-86 31 55. Tengo Facebook y Twitter. Mi correo electrónico es merbuzó@gmail.com.
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