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Se trata de Favio Ernan Gómez Chamorro, Viviana Falcón y Éver Falcón. Mediante publicaciones de nuestro medio, la Fiscalía comprobó que los tres figuraban como funcionarios de la Cámara de Diputados, recomendados por el parlamentario, cuando en realidad cuidaban la quinta del legislador en Areguá.
Ibáñez ya cuenta con un pedido de desafuero pendiente de estudio en el Congreso mientras que su esposa, la abogada y exmodelo Lorena Plabst, también se encuentra procesada.
En la víspera, el juez de feria Hugo Sosa Pasmor impuso como medidas a los “caseros” la prohibición del salir del país, comparecer mensualmente en el Poder Judicial y una fianza real de G. 50 millones para cada uno, G. 150 millones en total.
Los tres procesados se negaron a brindar declaraciones a los periodistas apostados en Tribunales. Gómez Chamorro fue visto muy relajado, no así su cónyuge y su cuñado.
El abogado defensor, Timoteo González Cruz, profesional de alto perfil para el salario de estos supuestos funcionarios, señaló que un tercero, llamado “Anastasio Ojeda”, salió a favor del grupo y ofreció un inmueble en Paraguarí tasado en G. 250 millones, como garantía de embargo. El letrado negó que esta persona sea un prestanombre o esté vinculado al diputado colorado.
Sosa Pasmor remitirá la causa al juez Miguel Tadeo Fernández desde el 1 de febrero, cuando este último retorne de sus vacaciones.
En representación del Ministerio Público acudió a la audiencia la fiscala de Delitos Económicos y Anticorrupción Yolanda Portillo. La agente señaló que desde la fecha retoman el caso el fiscal José dos Santos y otros colegas suyos.
Antecedentes
El diputado José María Ibáñez en secreto hizo figurar como funcionarios de la Cámara de Diputados a los cuidadores de su quinta, mientras se quedaba con parte de los salarios. Posteriormente, los llevó al Congreso vestidos como empleados públicos para intentar despistar. Los tres caseros, de víctimas, pasaron a ser cómplices.