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CAACUPÉ, Dpto. de Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional).Luego de la misa del Domingo de Ramos realizada ayer en Caacupé, en declaraciones a la prensa, el presidente de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP), Mons. Giménez, se refirió al caso de Arlan Fick, que aún se encuentra en manos del grupo criminal autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). El obispo señaló que el joven secuestrado ya tendría que haberse liberado, porque se cumplieron con todas las exigencias de sus captores.
“Todos estamos preocupados y esperando a este chico, por lo que les pedimos de todo corazón a los que lo tienen secuestrado que lo dejen libre”, manifestó el religioso.
La familia Fick Bremm de Paso Tuyá cumplió el sábado con la última exigencia del grupo criminal, que exigió repartir víveres por valor de 50.000 dólares en las localidades de Kurusu de Hierro y Arroyito, localidades del departamento de Concepción. Sobre este hecho el titular de la CEP señaló que esta es una práctica que se da en el extranjero y “forma parte del estilo de guerra de ellos”.
Manifestó que es la hora de que esto se pueda superar y buscar caminos de diálogo y de concordia, así como entendimiento, en un marco de convivencia democrática, para crecer y hacer progresar nuestro país. El obispo finalmente sostuvo que con la violencia realmente no se puede lograr un país mejor.
Arlan fue secuestrado de su casa la noche del miércoles 2 de abril pasado, cuando miembros del EPP tomaron por asalto el silo de su familia y un retiro de la estancia “Casa Blanca”, situados uno frente a otro sobre el camino que lleva a Kurusu de Hierro.
El suceso originó una feroz balacera entre los criminales y la Fuerza de Tarea Conjunta (militares y policías), en la que murieron dos miembros del EPP, Bernardo Bernal Maíz (20), alias “Coco”, y Claudelino Silva Cáceres (22), alias “Víctor”, además del vicesargento 1° de Material Bélico del Ejército Hugo Andrés Monges Ramírez (21).
Los del EPP hasta ayer no estaban cumpliendo con su promesa de liberar al adolescente una vez satisfecha su exigencia de reparto de víveres en la zona, donde vivió uno de sus líderes abatidos, “Coco” Bernal Maíz.
Secuestros y asesinatos
El grupo criminal extremista de izquierda EPP ha cometido varios secuestros y asesinatos desde su aparición en nuestro país. El primer rapto realizado por elementos de la banda fue de María Edith Bordón en noviembre del 2001, luego el de Cecilia Cubas ocurrido el 21 de setiembre del 2004, a quien mataron; en julio del 2008 fue capturado Luis Lindstron, liberado pero luego asesinado el año pasado; Fidel Zavala, secuestrado en octubre del 2009; y finalmente, Arlan Fick. Asimismo, el EPP ya asesinó a un total de 36 personas en un periodo de 10 años, de las cuales 20 son civiles y 16 entre policías y militares. Los peones de estancias y jornaleros son las víctimas preferidas de la banda criminal.