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CAACUPÉ, Dpto. de Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). El obispo Robledo manifestó que vivir la solidaridad significa para los católicos combatir la corrupción que destruye a las personas y a la sociedad, sobre todo a los más débiles y pobres. Fue durante la homilía del tercer día del novenario en honor a la Virgen de los Milagros de Caacupé, ocasión en que se realizó la tradicional peregrinación nacional del clero paraguayo. Estuvieron presentes en la celebración litúrgica centenares de diáconos y sacerdotes, venidos de diferentes puntos del país, así como varios obispos.
En un mensaje dirigido a los sacerdotes presentes, el prelado señaló que las características esenciales del sacerdocio de Jesucristo son la misericordia y la fidelidad. Teniendo en cuenta que Jesús se hizo solidario en relación a los hombres para rescatarnos del pecado y combatió con todas sus energías contra ese mundo que oprimía a los débiles y humildes, una cualidad que deberían tener todos los pastores y sacerdotes, expresó. Sostuvo además que el amor y la misericordia se realizan en gestos concretos de ayuda y de socorro.
Corrupción, un pecado imperdonable
En conferencia de prensa, Robledo señaló que la corrupción es un pecado imperdonable, porque los corruptos no se arrepienten y se mantienen en su postura de seguir con su ambición, con su avaricia y mentira para seguir oprimiendo a los más débiles, humildes y pobres.
En ese sentido no descartó que la Iglesia Católica pueda sancionar con la excomunión o suspensión de sacramentos en casos muy graves, que destruyen a una comunidad o generan daño irreparable, como ya ha sucedido en años anteriores.
Afirmó que la mayoría de las autoridades dicen ser católicos, pero que eso no se nota en sus actos. “Hay un divorcio evidente entre la fe y sus vidas y esto puede notarse en la aparición de narcopolíticos, por la ambición y las ansias de enriquecimiento a cualquier costo”, manifestó.
“Estos hechos destruyen a la sociedad e incluso han causado la muerte de varias personas, cosa que resulta inconcebible en nuestro tiempo. Los proyectos de la sociedad civil deben apuntar a que todos lleven una vida digna, porque es un derecho inalienable de todo ser humano”, enfatizó el obispo.
Mensaje a Ferrer
Asimismo, se refirió a la reelección del intendente de San Lorenzo, el colorado Albino Ferrer, salpicado por varios indicios de corrupción en su administración.
Al respecto, el prelado instó a Ferrer a que deje de lado la corrupción y trabaje en beneficio de la comunidad, por el bien común y en especial a favor de los grupos vulnerables.
“Le pido que respete los valores de la justicia y la honestidad y los practique por el bien de la sociedad”, expresó finalmente el obispo de San Lorenzo.