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Centenares de fieles, sacerdotes, obispos y el nuncio de Su Santidad, Mons. Eliseo Antonio Ariotti, participaron de la ceremonia de toma de posesión del nuevo arzobispo de la Arquidiócesis de la Santísima Asunción en la Catedral Metropolitana. Mons. Valenzuela pasa a ser el sexto arzobispo desde la creación de la Provincia Eclesiástica del Paraguay en 1929. Sus antecesores fueron: los monseñores Juan Sinforiano Bogarín, Aníbal Mena Porta, Ismael Rolón, Felipe Santiago Benítez y Pastor Cuquejo.
El nuevo pastor arquidiocesano cumplirá el 19 de noviembre 70 años y le quedan cinco años al frente de la Arquidiócesis porque a los 75 años deberá renunciar.
En su mensaje a los presentes en la ceremonia, Valenzuela prometió impulsar el espíritu misionero, priorizar la persona humana, recuperar la importancia de la familia y promover la formación de los laicos. Abogó por una ciudadanía que impulse una política patriótica que combata la pobreza.
Valenzuela también se comprometió defender la familia, sobre la base del matrimonio del hombre y la mujer, como insustituible educadora de sus hijos, para lograr una nueva persona capaz de centrar toda la evangelización y la política social del Estado favoreciendo su educación, su salud; en una palabra, su felicidad.
Se pronunció igualmente a favor de la vida y pidió defenderla de los ataques de las drogas, el alcohol, el tabaco, el sexo irresponsable, la pornografía, la prostitución y todo tipo de explotación y opresión. “El país necesita de laicos comprometidos con su fe y que promuevan el bien común”, resaltó.
Valenzuela aspira a una política social que combata la pobreza y que busque el bien común. “ Extirpemos de una vez por todas el flagelo de la corrupción, mal endémico que han llevado hasta a enlutar a familias y poblaciones enteras”, indicó. Finalmente, apuntó que la Iglesia estará siempre abierta al diálogo en la defensa de los pobres, indígenas, campesinos, de los que sufren y son excluidos.
Mons. Cuquejo pidió perdón
Al despedirse como arzobispo de Asunción, Mons. Pastor Cuquejo pidió perdón al clero y a los fieles si en algún momento no cumplió su misión. Invitó a acompañar a su sucesor, Mons. Edmundo Valenzuela, para mantener la rica tradición de la Iglesia, que con la llegada de un nuevo pastor se renueva en su misión pastoral. La ceremonia de instalación del nuevo arzobispo Valenzuela en su cátedra estuvo a cargo del nuncio de Su Santidad, Mons. Eliseo Antonio Ariotti, quien leyó la bula papal que ordena el cambio en la Arquidiócesis.