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La manifestación fue en contra del cercenamiento del territorio del municipio, y ocasionó una larga cola de vehículos, tanto en el carril de entrada como de salida a la ciudad.
A la par que portaban sus pancartas y hacían ruido con sus bombos, estaban siguiendo por radio el tratamiento en la Cámara de Senadores del proyecto de ley que modifica los límites entre las ciudades de San Lorenzo y Capiatá.
Los senadores finalmente rechazaron el proyecto de ley que tenía media sanción de Diputados, y de esta manera el documento pasa de nuevo a la Cámara Baja.
Óscar Américo Barreto, presidente del movimiento “Capiatá sin división” y a la vez presidente del Deportivo Capiatá, señaló que la protesta está motivada en la necesidad de dejar de perder territorio.
Detalló que si se aprobaba el proyecto iban a ser despojados de 160 hectáreas donde habitan aproximadamente 7.000 personas.
Uno de los argumentos esgrimidos por los senadores que opusieron al proyecto fue precisamente que no se realizó una debida ronda de consultas con las personas que serían afectadas con el cambio.