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La auditoría del órgano superior de control realizó un examen especial al Ministerio de Salud Pública y sus dependencias: Senasa, Digesa, Seam y Erssan.
Señala que Senasa (Secretaría Nacional de Saneamiento Ambiental) instala sistemas de provisión de agua, pero no cuenta con recursos suficientes para la fiscalización y monitoreo de las mismas en todo el país.
También Digesa (Dirección General de Salud Ambiental) cuenta con un laboratorio de análisis de calidad de agua potable y saneamiento, además del agua recreativa, pero, a la vez, no posee recursos para realizar un monitoreo que abarque todo el país.
Agrega que Digesa hace más de cinco años que no logra coordinar acciones con la Seam (Secretaría del Ambiente) para lograr el establecimiento de niveles de calidad común que deberían tener las aguas superficiales, subterráneas y atmosféricas.
En tanto que la Seam no elaboró la política hídrica nacional que es el documento base según la Ley 3239/07, “De Recursos Hídricos”, que establece el manejo de los recursos hídricos del Paraguay. Además, dentro de la misma ley, a más de seis años, todavía no elaboró el inventario nacional sistematizado de los recursos hídricos del Paraguay.
La Seam tampoco cuenta con un plan de manejo sustentable de los recursos hídricos del país, de manera a satisfacer las necesidades de las generaciones presentes, a fin de no comprometer las de generaciones futuras.
Erssan no tiene recursos
El Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Erssan) es el ente encargado de monitorear y fiscalizar la calidad del agua potable de todo el país. Sin embargo, solo cuenta con dependencias en la capital del país cuando se realizó la auditoría. Por falta de recursos, tanto humanos como financieros, no pudo cumplir sus funciones con todas las prestadoras, dice el informe de la Contraloría General de la República.