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SALTO DEL GUAIRÁ (Rosendo Duarte, corresponsal). El operativo –iniciado en la noche del martes último y que continuó hasta ayer de mañana– estuvo a cargo de la Unidad Interinstitucional para la Prevención, Combate y Represión del Contrabando (UIC), con el apoyo de 70 hombres de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), tres fiscales de la capital con 16 funcionarios del Ministerio Público.
En allanamientos simultáneos verificaron cinco depósitos y otra cantidad similar de puertos clandestinos sobre el río Paraná, logrando incautar un total de 30 potentes embarcaciones empleadas para el transporte de cigarrillos al lado brasileño. Otra gran cantidad de lanchas lograron escapar, alejándose de las orillas al darse cuenta del operativo.
Igualmente, fueron decomisados 19 vehículos de pequeño, mediano y gran porte que eran empleados para el acarreo de cigarrillo hasta las orillas del Paraná, en los puertos clandestinos, ubicados en la región del Km 2 al Km 5. También intervinieron puertos en la zona de Puerto Tigre.
Estos puntos contaban con toda la infraestructura para embarcar y transportar miles de cajas de tabacos al otro lado del río.
En los distintos procedimientos fueron hallados por lo menos siete marcas de cigarrillos, en su mayoría fabricados por Tabacalera del Este (Tabesa). También hay productos de otras firmas de Ciudad del Este y Asunción.
Emilio Fúster, responsable de la UIC, aseguró que se trata de un procedimiento sin precedentes en la zona, en el marco de la lucha contra el contrabando ordenado por el gobierno del presidente Mario Abdo Benítez. Dijo que tienen la orden de no perseguir a nadie en específico, sino combatir el flagelo del contrabando que produce pobreza y desempleo en el país.
Agregó que, si bien las cargas de cigarrillos incautados son nacionales y pudieron haber pagado algunos impuestos, el hecho de ser transportado a otro país en forma clandestina, fuera de la zona primaria, constituye contrabando. Además, señaló que el lucro que deja este tipo de negocio no se compadece con lo que podrían estar pagando al fisco.
Los fiscales María Estefanía González, Diego Zilbervarg y Carmen Gubetich de Catoni aseguraron que las cargas de cigarrillos no serán devueltas, como ocurrió en procedimientos similares en otros gobiernos. Afirmaron que serán destruidos dentro del proceso penal, aunque indicaron que la Aduana abrirá sumario administrativo. La lista de detenidos aún no fue dada a conocer, pero adelantaron que en su mayoría serían personales menores al servicio de los contrabandistas. Los “patrones” del contrabando normalmente no aparecen en los puntos de operativización de la actividad ilícita, ya que manejan sus negocios desde sus oficinas, indicaron. Toda la estructura desmantelada pertenecería a por lo menos cinco grupos de contrabandistas especializados en envío de cigarrillos al Brasil, en horario nocturno, a través del Paraná. Los intervinientes no dieron ningún nombre, asegurando que buscarán identificarlos y llegar hasta ellos en el transcurso de las investigaciones.