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Funcionarios que solicitaron el anonimato por temor a represalias relataron que son varios los casos de quienes aspiran a una carrera dentro de la institución y que se capacitan para ello, pero que deben conformarse con cargos en los que perciben poco más del salario mínimo.
Algunos de los defensores relataron que deben pagar de sus bolsillos los viáticos y hasta el combustible de los vehículos para poder asistir a los ciudadanos que soportan procesos penales y no pueden solventar el gasto de un abogado defensor. Mientras tanto, personas que estudian carreras como arquitectura, que nada tienen que ver con la institución, ingresan a cargos en los que reciben mejores pagas que quienes cumplen roles de vital importancia en la institución.
Defensores encargados de niñez y adolescencia, por ejemplo, debían realizar viajes a hogares de atención ubicados en el interior del país y se encontraron con la desagradable sorpresa de que no contaban con rubros para viáticos ni combustibles.
Precisamente, según las denuncias, son los defensores de niñez y adolescencia los que sufren la peor parte de la carencia de recursos en la institución.
Defensores en cargos administrativos
En tanto que algunos defensores deben lidiar con sobrecarga de trabajo, otros terminan siendo beneficiados por Selva Morel con cargos administrativos. Mientras la propia titular de la cartera asegura que se ven sobrepasados, ella misma decidió que tres de ellos pasen a realizar tareas netamente administrativas.
El abogado Fernando Ariel Cristaldo Bernal fue nombrado por Morel como su director de gabinete el 3 de octubre del año pasado.
Acorde con los datos, también pasó a cumplir funciones dentro de la Dirección de Gabinete, Olga María Blaires Frutos.
María Sol Samaniego Fernández, por su parte, pasó a la Dirección de Derechos Humanos, que se encuentra dentro del área administrativa. Ella es sobrina de Lourdes Samaniego, esposa del electo vicepresidente de la República, Hugo Velázquez.
Mientras, otros deben soportar sobrecarga laboral.