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Fue al explicar que la lucha contra los secuestradores se convirtió casi como en una guerra, especialmente por la crueldad con la que actúan esos malvivientes.
La mujer refirió ayer en su casa de Calle 18 de Arroyito, no muy lejos de donde fueron asesinados ocho militares el sábado, que su familia ya está mentalizada de que a Edelio le puede ocurrir lo peor en cualquier momento.
“Estamos preparados para lo peor. Sabemos que un eventual operativo contra esa gente puede terminar en la muerte de mi hijo o de esos otros dos secuestrados”, indicó.
También reveló que va a esperar hasta este fin de año a ver si el Estado actúa decididamente en el caso y que si no lo hace va a encarar una demanda a nivel internacional.
Contó como infidencia que sectores oficialistas tratan en todo momento de persuadirle de que no recurra a los organismos internacionales para no dejar mal parado al país, pero que otros políticos disidentes, como el senador Arnoldo Wiens y su equipo tratan de convencerle de que haga la demanda contra el gobierno de Horacio Cartes. “Estamos analizando bien lo que vamos a hacer, como familia, porque sabemos que los políticos nos quieren utilizar nomás para sacar provecho ellos”, concluyó.