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Hasta el cierre de nuestra edición, unos diez alumnos permanecían encerrados en el aula del tercer grado del colegio República Argentina, ubicado en la calle Cerro Corá casi Constitución, Asunción.
La ministra de Educación, Marta Lafuente, al producirse el conflicto convocó a dos ruedas de prensa. En la primera invitó a los estudiantes a dialogar y puso a disposición de ellos un autobús para que se trasladen hasta la sede del Centro de Producción para el Apoyo a la Discapacidad (Cepadis) para iniciar el diálogo. Los estudiantes solicitaron que se haga la reunión en la Secretaría de la Juventud, luego desistieron.
En la segunda reunión de prensa la ministra informó sobre la conformación de una comisión especial de diálogo integrada por el MEC, la Secretaría de la Juventud y la organización civil Juntos por la Educación, para concretar una reunión con los estudiantes hoy en Mburuvicha Róga.
Pero después los alumnos rechazaron esa propuesta y dijeron que seguirán con la toma de la institución educativa hasta que la ministra renuncie o sea desvinculda.
Durante su segunda conferencia de prensa, Lafuente señaló que las clases están suspendidas en el colegio República Argentina solo por hoy y que desde la fecha “se instalará una supervisión institucional con el objetivo de restablecer el servicio educativo y avanzar en el diálogo”, dijo.
En ambas conferencias, la ministra se ratificó en que no va a renunciar y que la destitución solo es competencia del presidente de la República, Horacio Cartes.
Los alumnos que tomaron el colegio República Argentina ingresaron a la institución cerca de las 10:00 de la mañana de ayer, aparentemente con una copia de la llave del colegio que estaba sin actividad académica por una jornada de capacitación docente.
Los menores en un principio señalaron que eran 30 alumnos y que todos cuentan con el apoyo de sus padres, más tarde se comprobó que son unos diez estudiantes secundarios de varios colegios. También exigieron que la ministra se presente para “dialogar” y en simultáneo apuntaron que ya estaban cansados de los diálogos y que la única salida es su renuncia.
La Policía Nacional llegó al colegio con 10 patrulleras y un pelotón de cascos azules (que luego la ministra solicitó se los retire del lugar). La policía forzó y rompió una de las puertas del colegio para posibilitar el ingreso de la comitiva del MEC, por ese motivo los alumnos se encerraron en un aula.
A medida que pasaron las horas fueron llegando algunos padres de familia, ciudadanos comunes y estudiantes de otras instituciones a brindarles su apoyo a los alumnos.
Oportunismo político
Algunos políticos como el senador Luis Alberto Wagner (PLRA) junto con el chileno Patricio Flores llegaron para dar su apoyo a los jóvenes. Wagner realizó un encendido discurso y alentó la renuncia de la ministra. Esto fue criticado en algunos sectores que vieron un oportunismo político en el hecho.
Más movilizaciones
Varias organizaciones estudiantiles expresaron su respaldo a los alumnos que tomaron el colegio, entre ellas la Federación de Estudiantes Secundarios (Fenaes) que convocó una movilización para mañana frente al Congreso, a las 9:00 y desde el lunes 9 de mayo instan a un paro indefinido en los colegios de todo el país, “hasta que Lafuente renuncie”.