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El mes pasado, el Frente Guasu había rechazado una propuesta de diálogo planteada por el Ejecutivo, argumentando que no era el momento, pues junto a grupos gremios y sindicatos de trabajadores y campesinos organizaron una huelga general contra el gobierno. Ahora, el exobispo indicó que ellos no están cerrados a un diálogo y que la pelota está en cancha del Ejecutivo para conversar principalmente sobre las políticas económicas que sostiene y las que pretende el Gobierno.
El senador indicó que no asistió personalmente al llamado que realizó ayer el Gobierno porque en la invitación se le expuso solo un “título” de que se presentaría un “plan financiero”, pero no se explicó a fondo el tema de la reunión ni si el ministro de Hacienda, Germán Rojas, estaría dispuesto a discutir otros temas que también preocupan a la concertación de izquierda.
“Si el ministro (Rojas) está abierto a discutir aspectos económicos, el Frente Guasu tiene realmente esos temas para proponer como la Ley de Alianza Público-Privada, condiciones para inversiones, plan de desarrollo nacional, infraestructura”, entre otros, mencionó Lugo.
No obstante, remarcó que el Ejecutivo es el que no le devolvió una respuesta tras el planteamiento que le hizo la concertación para dialogar luego de la huelga general de abril pasado y donde ellos pusieron varias condiciones previas. Lugo indicó que hasta el momento no mantienen ningún tipo de diálogo directo con el Mandatario.
El Frente Guasu había exigido a Cartes la derogación de la APP antes de sentarse a dialogar y buscar en todo caso otro proyecto de ley con el mismo objetivo, pero más acorde a sus pretensiones y corrigiendo varios cuestionamientos que tienen respecto a dicha ley.
Resalta entre los temas de interés a discutir mencionados por Lugo, el de una propuesta de legislación que garantice las inversiones en el país, porque es otro de los pilares de la política económica del Gobierno que aún están pendientes. El FG no es el único que había rechazado el diálogo, también acompañaron el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) y el Partido Democrático Progresista (PDP), quienes consideraban que Cartes no pretendía un diálogo, sino una exposición de sus planes.