La remoción del fiscal Ferreira es vendetta de narcos, acusa Fiscalía

Para el Ministerio Público, la destitución del fiscal antidrogas Isaac Ferreira es un desquite impulsado por narcotraficantes. Un informe enviado por el funcionario a sus superiores indica que intervino en cinco casos en que lograron desbaratar organizaciones criminales y generar duras condenas.

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Ferreira fue relevado de la Fiscalía el martes último, por el voto mayoritario de miembros del Jurado de Magistrados sobre un caso que ocurrió en el año 2008 cuando era fiscal de Villa Hayes. Se le cuestionó que tardó ocho meses para realizar un desalojo y que tomó declaraciones que luego no firmó.

El dictamen de la asesoría jurídica del Jurado fue por el apercibimiento, pero los juzgadores con una apretada mayoría de cinco votos contra tres removieron del cargo al fiscal antidrogas.

Ferreira explicó en un memorándum enviado al fiscal adjunto antidrogas Marco Antonio Alcaraz, que intervino en el caso denominado Águila Negra I, en el que se incautaron 1.886 kilos de cocaína, en La Paloma, Canindeyú, el 10 de noviembre de 2012. La causa culminó con la condena de 21 procesados por tráfico de cocaína. Uno de ellos es Ezequiel de Souza, cuyo nombre trascendió cuando contó a senadores detalles de la implicancia de autoridades del Gobierno con el entonces capo de Pedro Juan Caballero Jorge Rafaat Toumani, quien fue asesinado el pasado 15 de junio.

Ferreira estaba interviniendo últimamente en el expediente Águila Negra II, que tuvo origen con la incautación de más de 1.000 kilos de cocaína en una estancia de Villa Hayes. Esta causa, que tiene cinco acusados, está en pleno juicio oral y el acusador es el referido agente. El fiscal sigue con este caso y en otros más, mientras se espera que la Corte Suprema resuelva si ratifica la resolución del Jurado, que es cuestionada por la Fiscalía, o la rechaza.

Otro hecho en el que intervino Ferreira tiene que ver con la incautación de 3.162 kilos de marihuana que eran llevados a Uruguay en el barco Doña Verónica. Fue detectado en el Paraguay, a la altura de Villeta, el 10 de octubre de 2012. El caso dejó siete condenados, a 17 años de cárcel.

Igualmente, Ferreira lleva adelante una causa contra el condenado a 25 años de cárcel Tomás Rojas, a quien acusó de dirigir una organización criminal desde la cárcel para traficar cocaína, y cumple una condena de 25 años de cárcel.

Otro caso que Ferreira se encuentra investigando tiene que ver con una organización que operaba desde Caaguazú para llevar cocaína proveniente de Bolivia al norte de Brasil y luego Europa. El informe indica que una empresa de nombre San Jorge SA fue creada para el efecto. Están detenidos Ulises Cardozo y David Martínez, quienes siguen procesados.

El último caso que cita Ferreira en su informe se refiere a la incautación de 250 kilos de cocaína en Fortuna Guazú, Amambay, causa que sigue en proceso.

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