Cargando...
El 11 de enero pasado el juez Gustavo Amarilla se apartó de entender en el caso audios. Alegó que el hijo del abogado Álvaro Arias, defensor de Fernández Lippmann, es funcionario de su secretaría.
El caso fue sorteado y recayó en el juzgado de Paublino Escobar, quien ayer impugnó la inhibición de su colega y le devolvió el expediente.
“El hecho que supuestamente el hijo del abogado Álvaro Arias trabaje en el juzgado penal de garantías N° 8, como funcionario no se halla previsto en el artículo 50 del Código Procesal Penal como causal de inhibición o recusación, en razón de que es el magistrado quien debe hallarse afectado por motivos graves que afecten su imparcialidad o independencia y no un funcionario al servicio del juzgado, quien finalmente no tiene poder de decisión, y en caso de hallarse afectado el juez o tribunal ante el cual actúan, deberá averiguar sumariamente el motivo invocado y resolver lo que corresponda”, dice en una parte la contestación del juez Escobar.
También el magistrado Escobar señala que Gustavo Amarilla, pese a apartarse de este expediente, no tuvo igual conducta en otro caso en el que está procesado Raúl Fernández Lippmann por lavado de dinero y enriquecimiento ilícito, donde apunta que incluso su colega ordenó la prisión del exsecretario del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados.
“Como se podrá apreciar el juez inhibido alega como motivo de su excusación, circunstancias carentes de elementos de convicción que acrediten fehacientemente la postura asumida, además de hallarse huérfanas de sustento legal que vulneren el principio de juez natural. Por las razones mencionadas, este juez impugna la inhibición del magistrado Gustavo Amarilla, por su notoria improcedencia, a los efectos de salvaguardar el principio de juez natural de la causa, solicita se reencaucen los trámites en el presente proceso, disponiendo que el presente proceso sea tramitado por el magistrado inhibido”, dice la última parte del escrito del juez Escobar.
De esta manera ahora el caso sigue sin un juez y con diligencias pendientes.