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El jefe policial declaró a la fiscalía que se recibió la denuncia de un asalto en uno de los retiros de Campo Morombí por lo que se constituyó en el lugar acompañado de otros dos policías.
“Cuando nos estábamos acercando al retiro salen a recibirnos aproximadamente setenta personas, de las cuales veinte más o menos se situaron en posiciones estratégicas a ambos lados del camino, ellos tenían armas larga”, explicó.
La situación era tensa, relató: “Mientras el grueso de las personas se ponían en línea con gritos nos amenazaban que iban a disparar y que iban a defender con sangre esa tierra, motivo por el cual optamos por retirarnos del lugar”.
Añadió que una semana después regresaron al lugar. “Hablamos con una persona que tenía un puesto de ventas precario frente al lugar por donde ingresaron los ocupantes a quien le manifestamos que les avise a los ocupantes y que les diga que nosotros íbamos en forma pacífica para informarnos de sus inquietudes”.
Siguió diciendo: “Posteriormente nos trasladamos al lugar donde estuvimos una semana antes, en donde esta vez ya fuimos recibidos sin tantas agresiones y amenazas, pero igualmente estaban armados; unos treinta más o menos tenían armas largas y el resto tenían armas blancas. En el lugar también había mujeres. más o menos diez eran, pero ellas no tenían armas visibles, por lo menos yo no pude visualizar”.
En ese momento Anoni fue alertado de lo que podría ocurrir: “Al conversar con ellos en todo momento expresaron que ellos no iban a salir del lugar y que seguirían allí hasta las últimas consecuencias, nos llegaron a decir que iban a matar y que también iban a morir si fuese necesario.
Agregó: “Esta vez pudimos hablar con ellos y una sola persona se dirigía a nosotros, quien se identificó como Rubén Villalba, el líder de ese grupo de invasores, en todo momento se mostró reacio a toda solución pacífica, por lo que nuevamente nos retiramos sin lograr una solución al conflicto”. (Más información en el Semanario Judicial).
Una clara advertencia
El comisario Miguel Anoni declaró que la noche antes del fatal procedimiento habló vía celular con Rubén Villalba, pero la conversación no tuvo el efecto deseado.
“Una vez más se mostró negativo a una solución pacífica, lo último que me dijo fue ‘que pase lo que tenga que pasar y aunque sea dos a uno vamos a terminar en este lugar’”.
La declaración de Anoni ante el fiscal Jalil Rachid se realizó en la jefatura de departamento Centra de la Policía, en Luque.
Anoni estaba con permiso debido a que resultó herido en el procedimiento del pasado 15 de junio en Curuguaty.