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La hija del fiscal general del Estado Yerutí Díaz Morínigo, al igual que su madre, la esposa del jefe del Ministerio Público, María Selva Morínigo, también resultó con influencias en la institución. Las amigas y compañeras de la joven accedieron a un cargo durante la administración del papá.
Mientras la parentela de la esposa, vecinos, amigos y hasta exdomésticas de la familia se ubicaron en fiscalía; las amigas de fiestas, ratos de ocio y algunas compañeras de la carrera de derecho de la hija también consiguieron cargo en la institución.
María Paz León González, la “mejor amiga” de Yerutí, según dedicatorias que la hija del fiscal le hizo en su cuenta de Facebook, ingresó como asistente en el 2013. La joven amiga se recibió de nutricionista el año pasado y en vez de ir a prestar servicios en un consultorio o una institución sanitaria, trabaja en fiscalía.
Magalí Recalde Peláez, otra amiga de fiestas de la hija del fiscal, también ingresó como asistente en el 2013. Romina Granada Ramírez, también del círculo social de Yerutí, según varias fotografías que pudimos rescatar, es otra cercana que se ubicó como asistente en el Ministerio Público.
Gabriela Raquel Samudio, amiga y compañera de facultad de Yerutí, ingresó como auxiliar este año en fiscalía. Denuncias remitidas a nuestro diario citan varios otros nombres de cercanas a la joven, contratadas por el padre en la institución.
Intentamos nuevamente comunicarnos con la directora de Talento Humano Elizabeth Alvarenga así también con Díaz Verón para una versión institucional del caso. La secretaria de Alvarenga alegó que su jefa “está de reposo”, mientras que el fiscal sigue en riguroso silencio.
Sobre la parentela de la familia, exdomésticas, vecinos que ubicó en fiscalía, en conferencia de prensa Díaz Verón se limitó a decir “cualquier paraguayo tiene la oportunidad de trabajar en cualquier institución de la República”.
Denunciarán a fiscal general
La Coordinadora de Abogados del Paraguay (Coapy) anunció que presentará una denuncia por supuesto tráfico de influencias y enriquecimiento ilícito contra el fiscal general Francisco Javier Díaz Verón.
“En un país serio ya se tendría que activar el juicio político, en este caso de evidente mal desempeño de funciones”, refirió la presidenta de Coapy, abogada Kattya González.