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El Gobierno recurrió a la iglesia para buscar apoyo en su plan de lucha contra la pobreza. El presidente de la República, Horacio Cartes, acompañado de su ministro de Exteriores, Eladio Loizaga, de su jefe de Gabinete, Juan Carlos López Moreira, y del secretario de Planificación, José Molinas, se reunió en la mañana de ayer con la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) para presentar el plan de combate a la pobreza y pedir respaldo. El encuentro con el Jefe de Estado en la casa de retiro Emaús, en Luque, se extendió casi por una hora. Después, el secretario de Planificación se quedó con los obispos para presentar y explicar en detalle el proyecto “sembrando oportunidades” que ya tiene identificadas a 23.000 familias en pobreza extrema que recibirán asistencia.
Molinas indicó que la intención es que la iglesia a través de los obispos repartidos en los distintos puntos del país sea la facilitadora para llevar adelante los programas. “Diócesis por diócesis, porque son ellos quienes conocen la realidad de cada una de las regiones”.
Insistió en que la iglesia puede ayudar mucho. “En primer lugar tiene un conocimiento local de las familias, pudiendo validar el trabajo de identificación que ya ha hecho el gobierno. Asimismo, pueden acompañar las acciones de apoyo al consumo y producción de tal manera que podamos hacer la entrega del apoyo con transparencia en el actual ambiente electoral”, insistió.
El ministro de Relaciones Exteriores explicó también que a partir de ahora se instalará una mesa de trabajo permanente con la Conferencia Episcopal para trabajar de cerca.
Monseñor Adalberto Martínez, secretario general de la CEP, señaló que la propuesta del Gobierno para trabajar juntos es muy interesante. Explicó que ahora los obispos analizarán el plan para ver cómo podrían ayudar en la tarea.
Análisis y reconocimiento
En la reunión con el Jefe de Estado, los obispos también hicieron un breve repaso de lo que fue la visita del papa Francisco y entregaron una placa de reconocimiento al Mandatario.