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No dio más detalles del acuerdo que suscribirá Rio Tinto con el Gobierno y reiteró en términos generales en qué consiste la inversión de la citada firma de aluminio. Tampoco se conoce el lugar exacto de su instalación, pero debe estar cerca de la hidroeléctrica de Itaipú o de la Entidad Binacional Yacyretá para tener energía eléctrica segura y con una directa línea de transmisión.
Uno de los temas más sensibles en la negociación es a qué precio el Gobierno nacional le venderá la energía a Rio Tinto.
Recordemos que los directivos de esta empresa canadiense solicitaron un subsidio en la tarifa eléctrica porque el Estado paraguayo recibirá otros beneficios adicionales, como G. 1.000 millones en concepto de inversiones anexas (como el parque industrial), además de la inversión propiamente dicha, que oscila entre US$ 2.500 millones y US$ 4.500 millones, pagos de tributos, creación de mano de obra, caminos, etc.
De 60 a 32 dólares
Fuentes cercanas al presidente Federico Franco señalaron que la consultora inglesa CRU Strategies contratada por el Ministerio de Industria y Comercio sugirió una tarifa de US$ 32 a
US$ 38 el MW/h para Rio Tinto cuando que en realidad se debe comercializar como mínimo a US$ 60 por megavatios/hora.
Durante el Gobierno de Fernando Lugo, Rio Tinto realizó dos modificaciones del proyecto original con la esperanza de que el Gobierno paraguayo le apruebe el proyecto. El Ejecutivo le había condicionado que no solo produzca aluminio, sino que también industrialice para evitar la mala experiencia de la soja y aumentar la capacidad de 485.000 a 674.000 toneladas al año. Desde el 2009, representantes de Rio Tinto Alcan están dando vueltas en el país con la intención de radicar su capital. Proponen invertir alrededor de US$ 4.000 millones y crear 1.200 puestos de trabajo. Pero la contaminación del medio ambiente es uno de los puntos conflictivos del proyecto.
Consumidor absorberá
Si el Gobierno nacional le entrega una tarifa eléctrica subsidiada a la firma Rio Tinto Alcan menor a US$ 60 megawatt/hora, la diferencia pagará el consumidor paraguayo, según técnicos del
sector energético.
Será como comprometer el bolsillo de los ciudadanos, porque para cubrir la diferencia del costo de la energía se deberán elevar los impuestos o la tarifa eléctrica.