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La franja costera, que incluye la construcción de avenidas en el Bañado Sur, viviendas sociales en esta zona y en el Bañado Norte y la Chacarita, con un presupuesto millonario, deberá terminar para el 2023, según expresó el ministro de Urbanismo Dany Durand, presente en el acto de la Casa de Gobierno.
El acuerdo firmado es para diseñar “mecanismos de gestión interinstitucional conjunta” que tengan en cuenta todos los aspectos sociales y técnicos de lo que pueda significar la ejecución de la obra, explicaron.
La firma del memorándum viene luego de un acuerdo de Cooperación Conjunta entre las mismas instituciones, más el Poder Judicial, que tiene el compromiso de buscar soluciones definitivas a los damnificados de la zonas inundables de la capital.
Este acuerdo se rubricó tras una reunión convocada por la Iglesia Católica el 2 de noviembre pasado en sede del Arzobispado.
El intendente Ferreiro destacó que primero se tendrá en cuenta a la gente, sus intereses y necesidades, y luego realizar las obras. Dijo que Abdo Benítez tiene la misma visión.
Por su parte, Valenzuela aseguró que el acuerdo servirá para “acelerar el proceso de estudio e implementación de un mecanismo de gestión que asegura al país la continuidad de las obras, más allá de los cambios de autoridades, tanto de la Municipalidad como del Gobierno nacional”.
Las viviendas –unas 3.000– que se construirán en el bañado norte serán financiadas con un aporte de la República China (Taiwán) de 66 millones de dólares, recurso que pronto estará disponible, según Durand. También hay financiaciones de bancos internacionales para las obras.