Aunque no encabeza la bancada más numerosa que resulta de la encuesta, ya que la misma corresponde al partido Colorado con Horacio Cartes a la cabeza, tendrá a su disposición una bancada de once miembros que actuarán de manera disciplinada a las indicaciones de su líder.
La bancada colorada de 13 miembros difícilmente podrá operar como una sola bancada (aunque al inicio lo haga) ya que los cartistas (7 en total) seguirán obedeciendo a Cartes mientras que los de Colorado Añetete apoyarán necesariamente al Poder Ejecutivo solamente.
De entrada la presidencia del Senado podría continuar en manos de Frente Guasu, ya que la encuesta dice que con los votos propios (11) más de los liberales (8), de Partido Democrático Progresista (3) y del Partido Demócrata Cristiano (1) tiene los 23 votos requeridos por la mayoría para elegir nuevamente a Lugo o a otro de la concertación.
Es por eso que con Lugo se tendrá que negociar básicamente todos los temas relevantes que deben pasar por el Congreso, como por ejemplo la reforma o enmienda de la Constitución para establecer la reelección presidencial, la renegociación del tratado de Itaipú con los brasileños, el juramento discutible del actual presidente como senador activo fuera de tiempo, en caso de que no renuncie al cargo, interpelación de ministros y otros funcionarios, eventual juicio político, pérdida de investidura de senadores, entre otras cosas.
El siguiente eventual senador con mayor influencia será Horacio Cartes, que arrancaría con siete senadores. Como es habitual en la práctica política, es probable que algunos de ellos no resistan las tentaciones del Poder Ejecutivo y abandonen el cartismo, pero es probable también que ocurra a la inversa.
Cartes tiene experiencia y medios para reclutar votos de otras bancadas para cuestiones puntuales.