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“Como pastores de las diferentes iglesias cristianas evangélicas del Paraguay, apoyamos y animamos a los indignados que repudian a los senadores que votaron en contra del desafuero”, dice un comunicado de la organización religiosa.
“Pedimos a los señores senadores como medida de urgencia la revocación de su posición del pasado jueves 14 de noviembre, y que sin pérdida de tiempo voten en mayoría por el desafuero correspondiente”, enfatiza el documento que lleva la firma de Santiago Maldonado, presidente de la APEP, y Francisco Verón, jefe de prensa de la entidad.
La ciudadanía “está indignada como nunca contra los senadores que siguen protegiendo la vergonzosa práctica de la corrupción y la impunidad”, añade el documento al señalar que la postura ciudadana se vio en las calles, en donde los manifestantes portaban carteles con escritos como “inmunidad no es igual a impunidad”.
El documento de la APEP advierte también que “la corrupción y la impunidad no solo afectan al Poder Legislativo”, sino también contamina “al Ejecutivo y el Poder Judicial, desde hace varias décadas”.
Tras lamentar que la corrupción no disminuyó, el manifiesto de los pastores evangélicos afirma que “basta con leer los diarios, ver televisión y escuchar radios para tener plena conciencia de lo que ocurre” en el país.
“El nepotismo está presente en diferentes instituciones públicas y avanza sin parar”, remarca antes de afirmar que esos hechos obligaron a los ciudadanos a manifestarse en las calles.
Al recordar que el presidente Cartes había prometido en su primer discurso ante la ONU luchar contra la corrupción, el papel dice que el jefe de Estado “no logrará estos objetivos solo”, porque “necesita el firme apoyo del pueblo paraguayo”.
El escrito afirma que los predicadores esperan “el rápido cumplimiento” de las promesas hechas por el presidente de la República para luchar contra la corrupción.
“El Gobierno y el pueblo deben unir sus fuerzas para lograr la patria soñada con la ayuda de Dios”, puntualiza el comunicado.