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La comisión de Juventud y Desarrollo, presidida por Rubin, debatió sobre la norma pero no emitió ningún dictamen al respecto. El legislador declaró que actualmente, a pesar de la autorregulación partidaria que establece sistemas de cuotas para candidatas en sus propios estatutos, la participación femenina continúa siendo baja.
Para el efecto, establece un incentivo económico especial que se repartirá entre la candidata y el partido que la seleccionó, con una relación del 70 y 30% respectivamente; y un segundo estímulo que premie a las mujeres electas con un porcentaje extra al partido.
Rubin alega en su exposición de motivos, que el proyecto no busca otra cosa que generar las condiciones para que la mujer participe por voluntad e interés, en igualdad de condiciones con los hombres a la hora de buscar un cargo público, sobre todo de elección popular.
El proyecto
La norma propone establecer en el presupuesto general de la Nación una partida excepcional a nombre del Tribunal Superior de Justicia Electoral para ser distribuida en concepto de incentivos para la participación política de la mujer paraguaya.
Plantea que estos incentivos económicos a ser distribuidos por el TSJE tengan una vigencia temporal de cuatro periodos electorales consecutivos, dos periodos electorales nacionales y dos municipales y el alcance del 30% de participación en mujeres electas.