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A reinicio del periodo ordinario de sesiones, la Cámara de Senadores deberá definir los pedidos de desafuero que existen sobre dos de sus integrantes. Uno de ellos, el senador Carlos Filizzola, del Frente Guasu, sobre el cual pesa una acusación por la compra irregular de helicópteros para la Policía Nacional, cuando se desempeñaba como ministro del Interior. El pedido judicial fue rechazado durante el anterior periodo legislativo, pero la coyuntura política fue aprovechada por legisladores colorados, en particular el senador Enrique Bachetta, para que se vuelva a analizar. La Justicia volvió a remitir el pedido en el último día de sesión, en diciembre pasado.
El otro caso que debe resolver el Senado es el del liberal Enzo Cardozo, sobre quien pesan acusaciones por el despilfarro de unos G. 50.000 millones, durante su gestión como ministro de Agricultura en la administración de Federico Franco.
Finalmente, la Cámara de Diputados deberá resolver el pedido referido al diputado José María Ibáñez que fue remitido ayer por la Justicia.
El caso del senador Víctor Bogado fue clave, ya que un intento de impunidad inicial motivó una gran indignación y movilizaciones ciudadanas, que lograron revertir la situación. Esto hace que pueda casi asegurarse que los pedidos pendientes de desafuero serán aprobados.