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En la mañana de ayer se realizó la audiencia preliminar para los acusados “caseros” Lucio Romero y Nery Franco. El tercero es Reinaldo Chaparro, quien no pudo afrontar la diligencia porque su abogado dijo que tenía otra audiencia y justificó con antelación.
En la diligencia, la defensa de Romero y Franco presentaron el incidente de sobreseimiento definitivo, que fue rechazado por la magistrada Paredes, quien resolvió elevar el caso a juicio oral y público para ambos. También les impuso medidas alternativas a la prisión, como ser prohibición de salida del país, no cambiar de domicilio, una fianza personal de G. 26 millones para cada uno que será cubierta por los abogados defensores y por último presentarse una vez al mes al juzgado a firmar el libro de comparecencia.
Ahora se debe sortear un tribunal de sentencia que entenderá en el caso y luego se fijará la fecha para el juicio oral y público. En el caso de Chaparro, quien no participó de la audiencia, se le fijo para el 5 de julio su comparecencia a la preliminar.
Antecedentes
Este caso de los “caseros de oro” del diputado de Paraguarí Tomás Rivas (imputado) se inició el 20 de mayo del año pasado cuando el fiscal Luis Piñánez comprobó que el legislador cartista hizo figurar en la nómina de funcionarios de la Cámara Baja a tres personas que en realidad eran sus “caseros”. Por esto el diputado Rivas fue imputado por los supuestos hechos punibles de cobro indebido de honorarios, estafa, expedición y uso de certificados sobre méritos y servicios de contenido falso. Mientras que sus “caseros de oro” –Romero, Franco y Chaparro– fueron imputados por supuesta estafa y cobro indebido de honorarios. Hoy los tres están acusados, mientras que Rivas permanece imputado porque se protegió en la figura de legislador para frenar la investigación durante un año. Recién el pasado 23 de mayo se logró aceptar la imputación contra el diputado de parte de la jueza Paredes, quien lo procesó y citó a la audiencia de imposición de medidas, que también fue chicaneada.
Para los tres caseros el proceso prosiguió y el fiscal Piñanez los acusó y pidió juicio oral, hecho que se concretó para dos de lo tres “caseros de oro”.