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Por 54 votos de colorados, liberales, patriaqueridistas, del Partido Hagamos, Cruzada Nacional y de la diputada Norma Camacho del PEN, los diputados se ratificaron en su decisión inicial y sancionaron el proyecto de ley que promueve la participación de las mujeres a través de capacitaciones.
Sin embargo, votaron en minoría por la versión de Senadores que propone la paridad política un grupo de 14 diputados, entre ellos Arnaldo Samaniego (ANR), Antonio Buzarquis (PLRA), Édgar Acosta (PLRA) y Kattya González (PEN). La única colorada que acompañó esta moción fue la excartista Marlene Ocampos.
La líder de la bancada de Colorado Añetete, Jazmín Narváez (ANR), quien había anunciado que votaría a favor de la versión Senadores alegando tener un compromiso con las mujeres, finalmente no emitió su voto en ningún sentido.
La diputada Celeste Amarilla (PLRA, efrainista) intentó que sus colegas aplazaran por ocho días el tratamiento de la norma.
El diputado Raúl Latorre (ANR, cartista) se encargó de cuestionar los artículos del proyecto de ley al argumentar que la versión del Senado plantea cuestiones inconstitucionales.
Mencionó que la Constitución plantea el derecho al sufragio para elegir a sus representantes sin importar su condición biológica, que se altera en el proyecto el concepto de igualdad garantizado en la Constitución, Ley del Código Electoral y Función Pública.
Indicó que con la ley de paridad se plantea la conformación de las listas de forma vertical entre hombres y mujeres, lo cual genera la perpetuidad de un sistema de listas bloqueadas, mencionó Latorre.
Añadió que la norma de paridad afectará a organizaciones intermedias, clubes, cooperativas, asociaciones, enfermeras y maestros, como también que el gabinete de la presidencia sea conformada de manera paritaria independientemente a los méritos, condicionando la cuestión ideológica. También mencionó que se elimina el mérito de una persona para acceder a un cargo público al plantear la paridad en cargos públicos.